Regalos de Navidad para los peques, ¿ya han pedido algo?

Hola,

ya sé que es un poco pronto aún, pero a mí me gusta pensar y comprar los regalos con tiempo, no sólo por evitarme agobios de última hora, sino porque odio los centros comerciales y tiendas abarrotados de gente; eso aparte y puesto que donde vivo las luces de Navidad ya están colocadas -no encendidas aún, menos mal-, como dijo mi bajito menor en cuanto vio el alumbrado colocado, "Ya es Navidad"    

El bajito mayor, a la pregunta de una de sus abuelas de qué quería recibir en Navidad, respondió que no lo sabía, que tenía que pensarlo... Le llevó varios días y terminó por decir que una lancha por control remoto. Aprovechando la ocasión, pregunté qué quería recibir en casa y, riendo, me dijo que yo ya lo sabía, que un barco, pero de los de verdad. Sonriendo también, le dije que ya sabía cuál era la respuesta y fue moderando el tono de sus peticiones hasta dejarlo en un bote hinchable o en una piragüa, pasando antes por una barca de madera de remos. Como él ya sabe, hasta que no nade "bien" (según los estándares oficiales, varios km ininterrumpidamente, etc.) y no tenga cierta edad para recibir cursos de deportes naúticos, no va a ser y tendrá que conformarse con las salidas en barco que hacemos de cuando en cuando.

El bajito menor, si se le pregunta, contesta que quiere muchas cosas y si encuentra algún catálogo a la vista, casi todo le viene bien  pero lleva deseando, desde poco después de su cumpleaños, los vagones del tren Thomas, Annie y Clarabel, así que ya les tengo echado el ojo y estoy a un click de pedirlos online, aunque aún tengo la duda de si comprárselos en madera o en metal para la colección de Take-n-play que posee. Como siempre, yo prefiero los de madera, pero también es cierto que con la otra colección juega mucho también...

Entre los regalos que ya están en casa esperando que llegue el momento, se encuentran dos barcos de madera distintos, uno para cada uno de los bajitos. Tengo una tripulación de muñecos pirata en madera para uno de ellos y me falta por comprar otra para el otro. Para ambos, un libro con la Canción del pirata, de José de Espronceda.

El tren de madera para el bajito menor, que no puede faltar cada año, ya está guardado también junto con otro set de carreteras de madera para su hermano mayor (para Reyes).

Para el bajito menor, tengo más herramientas para que juegue en el banco de trabajo (taladro-destornillador y sierra caladora) y para el bajito mayor un juego de estrategia (mastermind).

Para compartir, les compraré un set XXL de Lego classic junto con otro creativo, no sé si para Reyes o para Navidad, porque aparte quería comprarles un set de Lego a cada uno, para el bajito mayor uno de una nave espacial y para el peque, uno de Lego que ya tengo (los libros, los trenes y los Lego, no faltan nunca en casa cuando de regalos para los peques se trata ).

Tengo pendiente comprar un libro sobre minerales y otro sobre tiburones, ambos para el bajito mayor, junto con una colección de minerales y otra de fósiles de dientes de tiburón, también para él. Recibirá un libro y una colección en Navidad y el otro libro y la otra colección en Reyes. Para el peque, un libro con cuentos de animales y otro del Mago de Oz para Reyes.

Para el bajito menor, estaba a la busca y captura de un juego de lógica pero ha subido de precio bastante, supongo que por las fechas en las que estamos, así que seguiré mirando hasta antes de Reyes y si no, ya lo compraré tras las fiestas; en su lugar, pediría quizá una especie de tangram para peques o unos bloques lógicos.

Me falta también algún juguete científico para el bajito mayor y alguna otra cosa para el peque, aunque aún no tengo muy claro qué (este año estoy con poca inspiración   ).

¿Vuestros peques han pedido algo ya? ¿Tenéis alguna cosilla ya comprada o sois de las que disfrutáis del trajín navideño?

Un abrazo.

Medalidd, yo creo que eso de perder tiempo, dinero e inspiración para los regalos de la pareja pasa en todas las casas cuando nacen los peques... o, al menos, en la mía, también.    

De todas maneras, en mi caso, el papá de los bajitos siempre fue un hueso duro de roer cuando de comprarle regalos se trata: los libros se los compra él en cuanto hay alguno que le interesa, ropa también cuando algo le gusta o lo necesita... su trabajo es su pasión, así que él solito se procura todo lo relacionado con su "afición"; en definitiva, que yo terminaba casi siempre comprando los regalos típicos y tópicos -camisas, corbatas, cinturones, bufandas, etc.- y bueno, la verdad, de eso nos hemos liberado los dos y ya no nos hacemos regalos, sino algún detalle (desde una cena especial cuando duermen los bajitos a unas gominolas en forma de corazón dependiendo de la ocasión).

Desde hace algún tiempo, un poco pensando en la imagen que podría dar el árbol de Navidad pelado de regalos para los progenitores -como si sólo los hijos fueran sujetos con derecho a ser regalados-, solemos poner algún juego de mesa o cualquier otra cosa que podamos compartir en familia (alguna vez, si uno de los dos tuvo un momento de inspiración   , alguna otra cosa para uso particular y no comunitario).

En cuanto a los peques, yo suelo comprar en las ofertas cuando veo alguna cosa que me parece interesante o sé que desean los peques, especialmente cuando se trata de juguetes muy costosos -como es el caso de los barcos que les compré-, que además suelen subir espectacularmente de precio en cuanto llegan estas fechas.

En Navidad, si ya he cubierto el cupo -suelen tener, en casa, unos 3 ó 4 regalos cada uno tanto en Navidad como en Reyes, libros incluidos- y veo alguna oferta interesante, lo compro y lo guardo para más adelante, bien para cuando constato que "necesitan" algún juguete nuevo o para su cumpleaños (en la época del cumple del bajito mayor, por ejemplo, no suele haber gran selección).

A mi bajito menor le encanta la Paw Patrol, pero no encuentro ningún juguete que me termine de convencer o vea que le va a sacar partido; no sé si es que no hay o es sólo mi falta de inspiración...

En cuanto al bullicio navideño, yo lo llevo mal, con o sin bajitos, y peor según van pasando los años además...

M., tu A., igual que mi peque, que todo le viene bien...  Al bajito mayor, si encuentra algún catálogo, también le parecen geniales muchos juguetes..., aunque luego, a la hora de pedir sin catálogos de por medio, se lo piense bastante porque sabe que no va a recibir tantos. No sé, yo es que los míos, si les pongo más cosas, me da la impresión de que se saturan y ni se acuerdan de lo que recibieron con tanto paquete por abrir y aún así, me siguen pareciendo muchos regalos para un solo día...  ; por eso prefiero irlos dosificando a lo largo del año.

En cuanto a la Wii y similares, el bajito mayor no me pide -aunque sé que no le importaría tener una- y yo intento irlo estirando hasta que tenga, al menos, 10 años. No es que no les encuentre nada positivo pero, hasta que sean un poco mayores, prefiero que jueguen puntualmente en el ordenador de casa... Veremos si lo consigo...

Bel, ¿por qué lo cuentas con vergüenza? Si Lucía no lo pasa mal, ¿dónde está el problema? A mí me parece una gran idea, no sólo porque pueden examinar los juguetes en vivo y en directo -soñar con ellos y... desencantarse cuando es el caso- sino también porque luego son más críticos cuando los bombardean con la publicidad navideña... Yo no los suelo llevar habitualmente porque, aunque normalmente no suele haber problema si les aviso de antemano que no vamos a comprar nada más que X -los dos saben que no son centros de exposición precisamente -, ¡tardamos horas en salir de allí! Me ha encantado eso de que ella lo que quiere es elegir tranquila, ¡qué rica! Gran ventaja la tuya cuando toca convertirse en la ayudante del Sr. Noel...

María, a mis bajitos les encanta la cocina también y los Lego; el peque quiere aprender a tocar la guitarra, y no sé si darle ya algún instrumento de los de verdad para que sea de su propiedad o esperar aún un poco más... En casa de mi madre pueden pedir siempre un solo juguete también, aunque luego ella añada alguna cosa más -no siempre juguetes-.

Lo de que se agoten los juguetes es tremendo, yo hay alguno que se me ha acabado ya sólo porque me esperé un par de días y algún otro lo he visto triplicar su precio, así que si después de las fiestas queda alguno y baja de precio, lo compraré entonces, y si no, tendrá que esperar...

Un abrazo a todas.

Bueno, María, me quedo más tranquila entonces, ya veo que no es sólo que me falta inspiración...    Yo he visto el centro de mando dichoso a 70€ también -¡pero rebajado!, se supone que antes costaba 90€- y por más que lo he mirado y remirado, lo único que lograba pensar es que hay que ver cómo se aprovechan de las ilusiones de los niños para sacarnos los cuartos a los mayores...

Yo hago lo mismo que tú y compro sólo aquello a lo que estimo le van a sacar partido. Odio esos trastos horrorosos que les hacen gracia un día -¡o aún menos!- y luego van dando vueltas por toda la casa hasta que se rompen y puedes tirarlos; o peor, esos otros juguetes que se rompen antes de que pase media hora de haberlos comprado... Apenas tengo de esos en casa ya pero en los primeros años del bajito mayor la familia extensa le regalaba un montón y yo iba loca retirándolos a la que el peque se descuidaba porque, para colmo, la mayoría ni siquiera eran aptos para su edad...

En cuanto a la distancia entre cumples y Navidad, mi peque es el que tiene más cerca su cumple de esas fechas, aunque hay una distancia razonable entre uno y otras, pero tiene que ser un problema, sí...

Me alegro de que hayas encontrado el libro que buscabas, ¡menudo alegrón se llevará el peque!  Yo no le he comprado al bajito menor de ese estilo porque tenemos varios en casa, algunos del bajito mayor, y no sé si es un error porque quizá él querría poseer alguno propio...

Un abrazo.

Medalidd,

yo suelo decir también que en casa han sido bien amortizados los juguetes pero eso sólo lo predico de los que le he comprado o elegido yo...  La familia extensa es otro cantar, no sé por qué pero muchos no suelen acertar: le han llegado a regalar al mayor con 2 años un barco con radio control para niños mayores (que obviamente sucumbió rápido a los embates de mi bajito mayor y al remojón accidental del mando de control) y con 7 ahora, juguetes para nenes pequeños   ; de los juguetes de baratija que se rompen casi con sólo mirarlos -y no es exageración- ya mejor ni hablar, y les sentaba mal cuando se los retiraba de peque pero para mí, la seguridad es muy importante, aunque por más que expliqué los riesgos, no hubo manera de que se dieran por enterados durante bastante tiempo.

Con el bajito menor ya ha sido otra cosa y se han limitado a pinturas, libros para colorear, libros de pegatinas, cuentos, plastilina, pelotas, etc., no sé si porque me han dado ya por imposible o por estimar que ya tenía suficientes juguetes del bajito mayor; aún con todo, algún regalo ha tenido que, si bien era adecuado para la edad, ha pasado con más pena que gloria por casa como un Tinky Winky con una especie de televisión y música, al que apenas si le dedicó unos minutos durante algunos días o un muñeco de unos payasos muy famosos por aquí pero que ninguno de mis hijos soportaban...

Yo tengo la sensación de que compraban lo que les hacía gracia a ellos sin reparar en a quién iban destinados; en fin, la intención es lo que cuenta...

Nosotros algún juguete de más peques tenemos con los que el bajito menor sigue jugando porque también lo adaptó e incorporó de otra manera al juego; otros los he retirado ya porque con dos niños, tanto despliegue de juguetes y un uso más bien puntual, dadas las dimensiones de nuestro hogar, ha sido aconsejable retirarlos.

Tampoco han sido sin consecuencias las retiradas en casa, a pesar de hacerlas coincidir con nuevas incorporaciones de juguetes. Cuando el mayor tenía dos años y medio, con ocasión de las fiestas navideñas, aproveché la noche de Reyes cuando colocaba los regalos, para retirar varios con los que ya no jugaba. El bajito mayor a mí no me dijo nada -aunque sí ví cómo miraba a todos lados buscando lo retirado, a pesar de estar acostumbrado a la rotación de juguetes-, pero mi madre me contó que a ella le había dicho, semanas más tarde, con mucho sentimiento, que "los Reyes se llevan los juguetes".

En cuanto a la indestructibilidad de los juguetes, el bajito menor tuvo un piano de la marca Chicco que ha pasado por cinco niños, incluidos mis bajitos, y estaba como nuevo hasta que el bajito menor, tras repetidas intentonas, eso sí, de comprobar la ley de la gravedad, logró que no funcionara bien -sospecho que hay algún cable suelto o similar en el interior, porque a veces funciona-. De la marca fisher, hemos tenido juguetes también, alguno de los cuales ha pasado por tres peques igualmente antes de que llegara a los míos (ésos me los regaló una amiga) y aunque han aguantado bien, un par de ellos tienen ya algunas heridas de guerra que les hizo mi bajito mayor cuando volví a desempaquetarlos para el peque...

No me extraña que tu peque se duerma de puro agotamiento ese día   ; los míos, también, porque tras el rato en casa empieza el peregrinaje -desde Nochebuena- casa por casa para recibir los regalos de la familia extensa... Es agotador y estresante para nosotros, los mayores, que somos los encargados de dosificar el tiempo en cada lugar, aunque últimamente lo estamos gestionando de otra forma y mejor... Cuando volvemos, parece que hemos asaltado un almacén...  

En fin, no sé, a mí me encanta que mis hijos disfruten y verlos felices con sus regalos pero, no sé si es que soy yo que soy de naturaleza "preocupona", pero aunque procuro tener cuidado y tratar de lograr un equilibrio, me preocupa fomentar un consumismo exagerado...  

Un abrazo.

Natalia, menos mal que no soy la única que confiesa que no soporta el trajín navideño, me estaba empezando a preocupar un poco.      Como dices, se disfruta mucho pensando en los regalos y, aunque nunca he sido muy navideña, ahora disfruto la ilusión que ponen ellos en celebrar. Por aquí ya hay exposición de árboles artificiales de Navidad en algunos lugares y los bajitos ya han intentado que compre alguno más  (me he negado, claro, que tengo varios ya -una larga historia-) y algún adorno de Navidad nuevo.

En casa los juegos de agua los han disfrutado mucho y los siguen disfrutando aún, aunque durante el curso escolar tenemos menos ocasiones de hacerlo ya. Mi madre siempre me pide que elija los regalos también. Lo de los cuentos repetidos al infinito es común en casi todas las casas...   ; eso sí, te advierto que si los nuevos cuentos le caen en gracia, se volverá a repetir la historia...  

Belén, si le has contestado cuando te preguntó, Lucía ya lo sabe, pero si no siente necesidad de pedir nada, será o bien porque no necesita nada, o bien porque se dio cuenta de que soñar con algo puede ser tan hermoso como el momento de recibirlo (a veces, incluso, mejor    ). A los bichitos de San Antonio -nunca lo había oído, lo entendí porque lo pusiste en francés, qué cosas   - por aquí los llamamos mariquitas (ya casi no se ve ninguna   ).

No sé hasta qué punto el hecho de no dejarles ver publicidad influye, la verdad, aunque yo también procuro no dejarles verla en casa; ahora bien, fuera de casa, a veces sí que han visto y el bajito mayor tuvo una época en la que pedía de todo. Yo trato de enseñarles a consumir con perspectiva y espíritu crítico -y algo siempre va calando, o eso espero, al menos- porque, por mucho que yo trate de evitarlo, más tarde o más temprano se van a ver inmersos en pleno consumismo. No quisiera quedarme corta y que "sufran" o se resientan por "faltarles" algo, pero tampoco pasarme, y aún así, a mí me sigue pareciendo que se juntan con muchos juguetes en muy pocos días y se saturan, especialmente cuando son más peques...

Un abrazo.

Désirée,

pues sí que ha sido comedida tu hija mayor (14 ya, cómo pasa el tiempo...). Ya nos contarás, pero si sólo pide eso y la pequeña tampoco mucho más, el Sr. Noel y compañía no van a tener mucho trabajo, no...

Un abrazo.

Cristina,

no sé si tu peque tiene una cocina ya, pero si no, ésa podría ser una buena opción junto con alimentos de juguete o reales -en este último caso, hay que estar atenta dependiendo de lo que se le dé) y menaje de juguete: a mi bajito mayor , con dos años, le regaló mi madre una cocina de madera y la ha usado mucho -yo le compré todos los complementos, alimentos de madera, algunos con velcro para "cortarlos" con sus cuchillos de madera, cazuelas de acero inoxidable, platos de cerámíca y cuencos; el bajito menor, también y aún sigue jugando con ella. También les hemos regalado a ambos un kit de limpieza completo de su tamaño (escoba, fregona, cubo, recogedor, cepillos, trapos, palanganas...).

Algún muñeco con complementos (ropa, bañera, camita, pañales...) te podría dar juego quizá -en casa han jugado ambos, más el peque que el mayor, pero nunca han sido un éxito tampoco, aunque también es verdad que en el cole tienen un rincón de la casa que incluye un muñeco y que yo, como no les hacía tanta gracia, los tengo en una estantería poco visiblle-.

A ambos les he regalado a esa edad excavadoras y camiones volquete (al peque, también una carretilla; quise regalarle también una mezcladora de juguete pero no la compré cuando la vi, y no he vuelto a encontrarla); han jugado mucho con ellas, tanto en casa como en la playa o en el parque -eso sí, te recomiendo que tengas sets distintos para casa y la calle porque si no te va a tocar lavarlos cada vez cuando vuelven de la calle-. Han tenido tanto grandes como pequeños y con todos han jugado mucho, si bien los camiones grandes, cuando eran peques, les encantaban porque podían sentarse encima.

Otro juguete con el que han jugado muchísimo ha sido un camión de los de transporte de vehículos de dos pisos y con rampa para subir a la altura superior.

Los juguetes de agua siguen siendo un éxito siempre (vasitos de diferentes tamaños con y sin agujeros y diferentes bordes -estos se los compré cuando bebés y jugaron varios años con ellos-, barquitos, simples recipientes de plastico de tu cocina que vayas a tirar...; a mi bajito menor le regalamos un set del tren Thomas para jugar en la bañera que le encantó).

Los puzzles de madera, de pocas piezas, también han sido un éxito en casa; una tabla grande con muchas imágenes de animales de diferentes formas para encajar -creo que esto se lo dimos entre los 12/18 meses, pero es posible que Feli aún pudiera sacarle partido-. También un juego con rampas de madera por donde bajaban unos diminutos autos, el mayor lo tuvo de plástico con unos coches más grandes.

Un juego con cuentas de madera grandes para ensartar hizo las delicias de mi bajito menor y, también unos juguetes con diferentes cerraduras -y sus correspondientes llaves- y cierres: mis bajitos han tenido una especie de matriuska que contenía distintos animales -para sacar el siguiente, había que abrir el cierre de cada uno de ellos, que era distinto del anterior y del siguiente cada vez; el primero tenía una llave- y un garaje con puertas y cerradura con llaves distintas (estos dos últimos eran de Imaginarium -creo que había en Argentina antes, no sé ahora si hay tienda física donde tú vives o si puedes conseguirlos online-).

Las pelotas de diferentes tamaños fueron un éxito en esa época y, por supuesto, los juegos de cubo, pala, rastrillo,molinillo, carretilla y diferentes moldes para jugar en la playa. De los juguetes de playa que más les gustaron, una cocinita con sus cazuelas y moldes para pasteles, un juego de helado, una paleta y llana de albañil de plástico, un taller con coches y moldes para hacer la carretera en la arena.

Un lazo de psicomotricidad de los más complicados quizá le podía dar mucho juego todavía; yo se los dí alrededor del año (lo probaron en una tienda mientras yo le compraba ropa y como ví que salvo alguno de los lazos, que les costaba más, lo hacían, compré uno) aunque, si no recuerdo mal, creo que estaban indicados a partir de los 18 meses.

Un caballito balancín para casa, también les gustó mucho a partir del año; una moto correpasillos si es que no tiene aún, o una bici sin pedales para dentro de unos meses. Un tren grande con vías que se encajan como si fueran puzzles y su estación (éste fue un regalo de uno sus tíos y han jugado muchísimo con él ambos; yo les compré pasos a nivel para completar y más trenes); también un circuito con el mismo estilo de carreteras con encaje de puzzle, que le regaló mi hermana (yo les compré un túnel y más cochecitos, trenes y motos).

Han tenido también un túnel que daba a una especie de casita (que se doblaba para guardar y se expandía al soltarla; hay muchas variantes, he visto desde un cuadrado a un tippi) y les gustaba mucho. Y una casita de tela con pelotas de colores -aunque a esto se le saca más partido cuando hay algún amiguito o primito para jugar juntos-.

Una pizarra "mágica" también les ha gustado mucho y, por supuesto, la plastilina, la tiza y las ceras gordas -si son triangulares, mejor- es un regalo que les encanta también. Si no tienes ni playa ni arenero, puedes comprar arena "mágica" para casa (no mancha).

También podrías comprarle un arco iris de esos que se encajan uno sobre otros (creo que eran Waldorf, si no me equivoco; yo eso lo busqué para los dos pero sólo los encontré de tamaño grande y eran excesivamente caros, aunque ahora, buscando para un regalo, he visto que hay otros tamaños más pequeños y económicos).

Si vas a comprarle cuentos, también podrías buscar alguno que traiga marionetas para escenificarlo después (si son de dedo, mejor; si no encuentras, puedes hacerlas tú bien con fieltro, bien pegando fotocopias plastificadas en un palito de los de helado o un depresor de madera).

Una mesa de luz también es buena idea (yo tenía en mente hacer una y, al final, por una u otra cosa, nunca terminé de ponerme a ello). Si tienes jardín, una casita de jardín le encantaría también.

Ahora mismo no se me ocurre ni recuerdo nada más, espero que alguna idea te sirva.

Cris,

a los familiares y amigos que me preguntan, les digo qué les podría gustar a mis hijos o si lo que ellos pensaban comprar sería de su agrado o no -y con mi asesoramiento aciertan, claro-. Al resto de la familia extensa, como no preguntan, no les digo nada. Alguno hay que, últimamente, tras muchas veces no acertar, me da dinero para que les compre lo que yo quiera. Yo preferiría indicarles algunos regalos que les pudieran comprar o bien comprárselos yo y que se los dieran ellos mismos porque, para mis hijos, no es lo mismo en absoluto, por mucho que yo les diga que esos regalos son de X (me he ofrecido, pero siguen haciéndolo así   ).

¿Andrea ha jugado con el Furby? Yo creo que mi peque, tras un par de días, lo hubiera abandonado en un rincón... Definitivamente, cada niño es un mundo...  

Mi bajito mayor, en vez de un juego de magia, me ha pedido que le apunte a la escuela de magos... Le he dicho que en verano ya veremos (que por decisión propia tiene la agenda más apretada que un ministro... y más porque no le dejo yo, que si por él fuera...   )

Mis bajitos han visto los dos Del revés, y aunque les gustó a ambos y les encantaría volver a verla (miraré si ha salido ya en DVD y la compraré en alguna oferta después de fiestas), no me han pedido nada relativo a ella.

Veo que tú ya tienes los regalos en casa casi al completo. A mí aún me falta alguna cosilla y termino ya, por fin.

Un abrazo.

P.D.: Cris, acabo de ver tu segundo post, mis sugerencias eran para la otra Cristina (Jazmin) y su nene, Feli, de casi dos años, que pedía ayuda a las que tenemos niños un poco mayores.    Siento la confusión (para mí, tú eres Cris, y ella es Cristina)   ; de todas maneras, tampoco sabría qué sugerirte para tus peques, creo que en cuestión de juguetes, por lo que cuentas, los míos y las tuyas no tienen tanto en común    (la cocina del Ikea sí, que fue la que le regaló mi madre al bajito mayor y le encantó   : nos fuimos al almacén un día entre semana, el peque con sus dos años pelados y, como siempre dicen que los niños son bienvenidos, le dejé probarla antes: jugó durante más de una hora sin interrupción ).