Regalos para niños mayores

Regalos para niños mayores o de cómo la historia se complica según van creciendo...

Cuando mis bajitos eran peques, no había problemas con los regalos. Yo buscaba los recomendados como más  adecuados y me resultaba muy sencillo regalarles porque, además, mis bajitos siempre han sido muy agradecidos y -además yo creo tener muy buen ojo en general a la hora de fijarme en los gustos de la gente, aunque este feo decirlo -. Pero a la que el bajito mayor creció un poco, ya vi que la cosa empezaba a complicarse: por más que agradeciera el regalo (sólo una vez se ofuscó un tanto, aunque en ese momento lo estaba pasando él mal y se le juntó un poco todo), yo le notaba un tanto decepcionado...

Según ha ido creciendo, la cosa se ha ido "complicando": hay un momento (o al menos, en casa nos ha pasado) en que ya piden cosas de  niños más mayores pero a la vez sienten envidia de los regalos de los más peques de la casa. Ahora ya a punto de entrar/entrando en la preadolescencia es que pide unos regalos de lo más caros/sofisticados... No es que sea un gran problema tampoco: yo le explico que me resulta caro (y ofrezco alternativa si sigue insistiendo en ello de que sea un regalo único en conjunto de toda la familia extensa -si es que están de acuerdo, claro; antes sí, ahora no sabría decirlo, luego explico-) o por qué no me parece adecuado y, por más que alguna vez, si le pillo con el pie cambiado, se frustre un poquito, lo entiende perfectamente porque es un niño muy razonable.

El problema es que yo me encuentro sin ideas... No sé si es que tengo la cabeza en otras cosas y es que al no compartir ya tanto con el mayor, acierto menos (me refiero a que me cuesta ver qué le gustaría más porque ahora influyen cada vez más los amigos)... ¿También os pasa/os ha pasado?  (Uff, acabo de releerme y no sé si me explico, que no ando ya muy fina y les tengo pululando por aquí y estoy tratando de evitar, con disimulo, que lean lo que publico. Sin conseguirlo, pues acaba de decirme el más peque: no te estoy leyendo/estoy leyéndote... )

Otra cuestión es que siendo, para mí, aún muy jovenes (casi 10 el mayor, 6 el más peque), mi familia de origen insista, ya desde hace años, en que les "acostumbre" a no tener regalos sino a que reciban ropa o similar y un solo regalo vamos, que el comprarles lo que necesitan se convierta en un regalo en sí mismo. Y esto yo no termino de verlo pero no tengo claro tampoco que no sea el momento aún; yo estoy aún en un punto en el que les regalo alguna cosa que les apetece mucho -un regalo "regalo"  -  y sí que les cae también alguna otra cosa que necesitan pero en vez de comprarles algo más básico, procuro darle un punto especial si es regalo... No sé, yo creo que sin necesidad de forzar nada, de forma más o menos natural ya van en camino de que les apetezca que les regalen ropa o similar... (al menos es lo que percibo yo en el mayor). ¿Cómo lo véis?

Por ilustrar un poco más el "problema", voy a poner un ejemplo: la familia extensa sólo les da un único regalo por núcleo familiar , ¡y me parece perfecto!, pero no entiendo la insistencia desde hace años en lo que yo hago o dejo de hacer en mi casa, "que no les hace falta nada", "que con un regalo solo ya es bastante, no necesitan más" ... Tampoco es que en mi casa sea algo exagerado, creo: suelen tener unos tres en el cumple, uno principal que les haga mucha ilusión y otros dos más "habituales" y de un precio más bien bajo, de entre los cuales suele haber, al menos, un libro y el tercero puede ser algo que les apetece o un juego de mesa que podemos compartir todos.

No es que se junten con muchos regalos tampoco, en mi opinión: en total, de la familia extensa, dos regalos, un detalle y dinero más lo que reciben en casa (cuando celebran el cumple con sus amigos, no hay costumbre de hacerse regalos -como mucho, un detalle los más amigos pero lo compran con su asignación, los padres no intervenimos para nada-); sé que es más de lo que muchos niños en el mundo tienen y, ciertamente, más de lo que la mayoría de nuestra generación tenía pero creo que también hay que tener en cuenta el entorno a la hora de educar y, en el nuestro, los niños reciben muchísimo.

Nosotros no solemos hacerles más regalos en todo el año tampoco hasta que llega Navidad (libros sí compro pero, en la mayoría de ocasiones, "para casa" -me refiero a que son de la familia, no de uno en exclusiva-, algún juego educativo también pero también "para casa" y alguna vez, algún detalle pero pequeño y no demasiado caro); alguna vez, nuestros amigos sin hijos, les traen un detalle pero no muy a menudo. Trato de educar evitando el consumismo y en la mesura sin someterlos a un régimen espartano -que me parece contraproducente- pero no sé hasta qué punto me estoy pasando/quedando corta teniendo en cuenta el entorno. ¿Qué os parece a vosotras? ¿Opiniones? ¿Experiencias?

sí que me has ayudado ; ya sólo para empezar me has hecho reír con lo de que no os habíais traumatizado tus hermanos y tú por tener como regalo ropa y carbón en casa de las abuelas, que me hacía mucha falta (quizá me lo estoy tomando un poco "a la tremenda" y no he sido muy consciente   ). Por cierto, mis hijos esperan el carbón con ilusión  (son muy golosos los dos) porque saben que con carbón y todo, regalos habrá, pero soy yo la que no compro: me parece que está carísimo para ser un simple trozo de azúcar teñido -¡y aún odio más darles azúcar!, por pura coherencia con lo que predico pero, aún así, hay días que no queda otra que comprarles algo dulce  -.

Tenemos en común que yo también elegía los regalos para mis herman@s (a mi hermana más pequeña le llevo 10 años) pero también los míos    (las únicas "sorpresas" que recibía en mi casa eran de ropa, zapatos, paraguas, material escolar o alguna otra cosa que necesitara y a mí no me parecían regalos, la verdad ). Supongo que por esto le doy algunas vueltas de más a estas cosas... En mi caso, ni de adolescente me parecían regalos -supongo que producto de estar recibiendo estas cosas como regalo desde peque, además de no estar especialmente interesada en ir a la última moda más allá de "lo normal"- pero en mi bajito mayor sí que observo evolución porque desde hace años si recibe alguna ropa de su gusto de las abuelas (o mía de sorpresa si es que me parece que necesita algo y veo alguna cosa que le guste), sí que la aprecia, así que me parece que ya va en camino de eso sin forzar nada...

En el caso del bajito menor, sí que conserva aún la ilusión por estas fechas señaladas, por lo que pactar lo veo difícil pero explico que hay muchos niños a los que regalar y hay que repartir, etc., etc... Pero en cumpleaños sí que pactamos también con él, que si no, la lista de deseos sería bien larga...    Lo bueno es que es fácil hablar con ambos porque razonan muy bien y lo entienden fenomenal.

En cuanto a la cantidad son tres regalos en casa (uno principal y dos detalles más) y otros tres o cuatro de parte de la familia extensa y amigos (uno de ellos es un detalle).

Respecto a los gustos, pues es difícil porque a mi bajito mayor le gustan muchas cosas desde la historia a la ciencia pasando por la música y la literatura y, por ejemplo, libros de su gusto sí que compro durante el año sin una razón especial (en eso reconozco que me cuesta contenerme y no pongo ningún empeño en cambiar ); sí que voy siguiendo sus gustos pero es complicado justamente por eso que comentaba de que tiene muchos intereses o hobbies: alguna vez me ha pasado que aunque había comprado algo de su gusto, después decidió que prefería más otra cosa y se ha decepcionado un tanto (pero bueno, después de la primera vez que me ocurrió, si cambia de opinión en el último momento, le digo directamente que, sintiéndolo mucho, ya tengo el regalo comprado -en Navidad y fechas similares también-, ofrezco que lo pida en otro momento y se lo toma muy bien, sin decepcionarse apenas).

Tiene varios juegos: para construir robots, alguna cosa de planetas, de reciclaje, de química, de arqueología, de mineralogía... (de ciencia en general, incluido alguno de reconstruir esqueletos de dinosaurios), de construcción tipo lego y otros, de deporte, de manualidades, juegos de mesa -estos últimos, la mayoría son de la familia, no exclusivos suyos)... Lo del curso o juego para aprender a pilotar le hubiera encantado pero no he visto nada parecido por aquí (lo miraré). Alguna vez ha tenido un regalo-experiencia también... Si tienes alguna idea más, será bienvenida...

Lo de los videojuegos, reconozco que hasta ahora no había transigido mucho con eso. Ahora tienen una las típicas consolas portátiles que les dejo muy de cuando en cuando (no me gustan, odio que se queden completamente absortos durante horas, aunque quiero pensar que es más por la novedad que por otra cosa    -juegan muy, muy poco-). Lo de los videojuegos "educativos" me ha sorprendido un poco, la verdad ; yo no soy muy fan -lo digo por si no se había notado       - y no conozco demasiado. Mi hermana tiene una wii de deporte pero no la han probado aún y nosotros tenemos una PS4 con un juego de minecraft, otro de futbol y otro que no recuerdo ni de qué es pero del estilo...

Confieso que enterarme de que los "asassins creeds" es un juego para aprender historia, me ha sorprendido   ; con ese nombre, me esperaba otra cosa    Igual sí que necesito que me orientes sobre videojuegos educativos porque sospecho que es lo que van a pedir de ahora en adelante...

Un abrazo.

Hola, Fénix,

sí, me acuerdo de que tú eres de las mías , de las que vamos comprando durante el año (por eso, a veces, si cambian de opinión a última hora, si tengo lo suficiente o de más, le digo que ya están sus regalos comprados). No suelen hacer grandes pleitos: alguna vez insisten si les gusta mucho algo pero entienden que no, es no, y normalmente la insistencia es para asegurarse si en otro momento lo van a poder tener (y sí, uno de los regalos que reciben sí que es algo que han pedido; lo malo es que a veces se les ocurre que prefieren más otra cosa y, claro, ya es tarde ).

Para mí, la ropa no es regalo tampoco y forma parte de las necesidades, al menos hasta la adolescencia o preadolescencia, salvo que se trate de alguna prenda especial que hayan pedido (qué se yo, que sea polo en vez de camiseta, que tenga un dibujo de star wars o de animales, por ejemplo, que es lo que piden normalmente -las marcas no les preocupan, de momento; cruzo los dedos para que sigan así y lo ya trabajado hasta ahora siga dando fruto , aunque en esto no hay garantías... -).

Coincidimos en la batalla para ordenar (será que mis hijos y yo también tenemos diferentes tipos de orden ) pero no en lo de no romper o perder : algunos juguetes se han perdido y muchos se han roto, algunos pisados por nosotros los adultos en un intento de pasar a través del campo de batalla en que convierten la casa cuando disponen de tiempo, otros en un intento de verles "las tripas", otros han sucumbido a su afán de convertirlos en algo distinto... Lo malo es que ni rotos los puedo tirar si me ven: los coches rotos forman parte del garaje , a las piezas sueltas de lo que sea pronto les encuentran utilidad... No hay manera , tengo que tirarlos cuando se olvidan y "no miran" , salvo que sea algo que tenga punta afilada o que pueda ser peligroso de alguna manera que ahí sí que soy inflexible y va derechito al reciclaje...

Y sí, estoy de acuerdo contigo en que sólo una vez se es niño (y encima el período "infantil" cada vez se acorta más... ).

Un abrazote.

Pues aquí estoy de nuevo con dudas porque a mi bajito mayor no le da la gana de pedir nada para Navidad (dice que quiere muchas cosas pero no suelta prenda, a saber por qué porque hasta ahora pedía sin parar...). Ya ni me acuerdo qué le regalamos en su cumple... Me dan ganas de ponerle un vale de unos grandes almacenes en una caja... Uff, espero que esta racha pase porque qué mal... Menos mal que, para compensar, el bajito menor pide sin problemas (eso sí, más vale que me toque la lotería para poder costear todo lo que pide )

Hola, Fénix, me alegro de leerte por aquí.  

Si te soy sincera, he tenido que hacer un esfuerzo para acordarme de qué le regalamos al bajito mayor; si no recuerdo mal, en casa recibió un juego científico para hacer Slime que está de moda por aquí, un juego de robótica, otro de electrónica, un Lego, un pijama, una sudadera y un par de libros, todo ello repartido entre Navidad y Reyes -dos juegos, una prenda y un libro en cada una de las fechas-. Por parte de la familia materna, ropa, libros y algo de dinero; y por la parte de la familia paterna, dulces y dinero (que usó para reponer sustancias de sus juegos de ciencia). 

Me dijo que le habían gustado todos sus regalos -aunque comentó que esperaba otra cosa, a saber qué   - y descontento no parecía en absoluto pero la verdad es que si se hubiera disgustado, no me lo hubiera tomado muy a pecho porque ya para Navidad tenía asumido que eso podía pasar y la verdad es que ha sido la Navidad en la que me he tomado sus regalos con más "desgana". Iba a comprarle un juego de mesa en lugar del juego de electrónica pero como no había el pack que yo quería en los almacenes donde fui a comprarlo, pospuse la compra para regalárselo en su cumpleaños. Hice un amago de ir a mirar los videojuegos para ver si encontraba alguno de los que me había recomendado Hanachi pero había tal follón que desistí -y lo he pospuesto para su cumpleaños- y volví rápidamente a la zona de "lo científico" a llevarme el juego de electrónica al que ya le había echado el ojo porque por allí estaba todo más tranquilo...  

El bajito menor recibió un juego de magia, un Lego, un juego de paleontología, una caja de Playmobil, otro juego de minerales, un coche teledirigido y un par de libros, también repartido todo entre Navidad y Reyes. Por parte de la familia materna, ropa, libros y algo de dinero; y por la parte de la familia paterna, dulces y dinero (que guardó para más adelante comprar algún otro juego). Al peque yo quería regalarle un juego de mesa en lugar del coche teledirigido pero el papá insistió en el coche teledirigido. 

Por aquí tienen también muchos juegos/juguetes pero intento dominarme (y a veces hasta lo consigo , menos con los libros que ahí ya reconozco que no mido -ni lo pretendo a estas alturas  -) y que no les caiga mucho más no sólo por no incrementar más la colección, que cualquier día salimos de casa nosotros para meter sus cosas, sino porque creo que no las valoran ni las cuidan como deberían (probablemente porque comparo con cómo las cuidaba yo a pesar de que la situación de mis hijos y la mía no son, por muchas razones, comparables pero... no puedo evitar hacerlo     ); por contra, creo que casi todo lo que tienen lo han disfrutado mucho (y con eso intento consolarme yo cuando no encuentran algo que les falta o se les ha roto algo por no haberlo guardado como deberían    ).

Un abrazo grande, Fénix.