Enfermera contra lactancia materna

Quiero, a través de este post, mostrar un caso más de los obstáculos con los que se enfrenta la lactancia materna, muchas veces situados donde menos pudiéramos imaginar.

Esta semana he asistido a una cita con la enfermera de mi centro de salud, ya que mi hijo ha cumplido un año, para medirlo, pesarlo y hablar sobre su alimentación. Cuando hablamos de la leche, hizo referencia a los biberones, y yo la interrumpí para decirle que mi hijo tomaba el pecho. Entonces ella quiso recordarme que, al igual que los biberones, sólo le diese por la mañana y por la noche. Yo le comenté que mi hijo tomaba el pecho varias veces al día, y entonces ella entró en cólera y me contestó: "¡Qué barbaridad! ¡Varias veces al día! ¿Pero para qué? ¿No te das cuenta de que el niño se está quedando contigo, que lo único que quiere es jugar con tu pezón?" Yo le dije que no era así, que él tomaba leche cada vez que quería. Pero volvió a contestarme: "¡Leche que va a tomar! ¡Lo que hace es jugar con tu pezón! ¡Y si toma leche es por tu culpa, que de tanto darle, pues claro, al final saca algo!" Y yo le pregunté que por qué sólo se le "podía" dar por la mañana y por la noche, que si me lo podía explicar. Y ella me dio esta respuesta: "Sí, porque el pecho necesita llenarse, y le hace falta tiempo. Y así toma lo que tiene que tomar. Claro, que él con esto sufrirá, pero bueno, es que tiene que ser así. Ya se irá destetando."

La verdad es que fue imposible dialogar con esta mujer, prácticamente me estaba echando una bronca por lo que yo "estaba haciendo" con mi hijo, y simplemente opté por no discutir con alguien con quien no merecía la pena. Era absurdo.

Gracias a la información que he recibido sobre la lactancia materna, siempre he tenido claro los beneficios de la misma, y también los obstáculos que me iba a encontrar, desde la presión social al propio personal sanitario. Pero no voy a ir contra natura.

Con esto vuelvo a pensar que realmente me gustaría ayudar a aquellas madres que no han recibido la misma información que yo, y que son incitadas (por decirlo de alguna manera) a no dar el pecho, por parte de médicos, de familiares, de amigos...y que lo hacen porque no conocen los beneficios de la leche materna.

Ojalá este mensaje sirva, aunque sólo sea un poquito, para ir abriendo los ojos ante este mundo lleno de máscaras y de mentiras que, con un poco de razón, sentido común y firmeza, podemos ir destapando.

Un beso a todas.

Rocío