triple screening y eco primer trimestre muy malos

Que duro Bárbara.. siento enormemente que os haya pasado esto. Sabes que hay un foro de ayuda a los padres que han pasado por casos como el vuestro? si quieres te dejo en link.

Te mando un abrazo muy fuerte... no tienes por qué justificarte con nadie, aunque siento que escribes también para ordenar tus ideas.

Date un tiempo, el que necesites. No estás sola.
Un beso

Aaaay, Bárbara, un abrazo.

 

(no sé qué decirte... llenaria la página de pero no es normal...)

seguimos a tu lado!

Bárbara, me alegra ver como lo vas asimilando, como lo vas ordenando todo en tu cabeza.

Lamentándolo mucho, es caro tener ese tipo de síndromes, y según está la vida... Qué triste es que el dinero haga tanto la diferencia en tantas cosas.

Seguro que Eric entiende lo que hiciste, tal vez llegue con mejor salud a otra familia o a la tuya propia, nunca se sabe. Piensa que tenéis un ángel que os cuida, perdónate porque lo hiciste con la mejor de las intenciones y para poder dedicarte y cuidar a tu hija... Ni siquiera lo hiciste por ti y eso te honra.

Aquí estamos para ti, eres una gran madre y una inmensa persona, eso no lo dudes.

Fuerza! La herida irá sanando con el tiempo.

Mil besos

Cómo váis, Bárbara?

LLego tarde, pero no puedo dejar de darte mi opinión. Creo que necesitas todos los puntos de vista para superarlo y ahí va el mío:

No te castigues. Lo que hiciste lo hiciste por amor. Amor a tu marido, a tu hija y a ese hijo al que no querías ver desvalido en un futuro.

La vida está llena de decisiones que no tienen vuelta atrás. Cuestionarse si fueron o no correctas no nos conduce más que al sufrimiento. Vosotros tomásteis una basada en buenos motivos y ya está. Eso es lo que tienes que pensar, que lo que decidisteis lo decidísteis creyendo que era lo mejor, y preguntarse ahora qué hubiera sido de actuar de otra manera no tiene sentido.

Si de verdad deseas volver a ser madre y quieres darle a Naya la compañía de un hermano lo harás. Necesitarás tu tiempo para recuperarte, pero llegará el día en que el deso sea mayor que los miedos y no tiene porqué repetirse esta situación.

Te ha tocado pasar un mal trago, pero en esta vida los hay amargos y muy dulces. Espero que llegue tu momento y puedas saborear de nuevo la maternidad.

Te deseo mucha fuerza y que puedas curar esa herida, por tu bien y por el de tu familia.

Un beso virtual.

Qué bienn, Almu. Achúchala de nuestra parte.

¡¡Cuanto me alegro!!
Espero que ese trabajo sea el inicio de una nueva etapa en sus vidas.

Un saludo

Un enorme abrazo a Bárbara. Ojalá que el nuevo trabajo ayude a enfocar en nuevos objetivos y pasar de página. Cariños miles, Romina

llevo dias que vengo y salgo, que tengo ganas de actualizar el post y de contaros otras cosas (correspondientes a otros hilos), pero se me hace difícil porque es como volver atrás... una sensación rara... Supongo que esa misma sensación me impide volver finalmente, pues necesito dejar cerrado este episodio.

He estado bastante bien, es decir... durante todo el tiempo que pude creé un escudo alrededor de mis sentimientos. Puedo hablar del tema con relativa tranquilidad, a nivel racional sigo sin ver otra salida (menos después de saber lo ahora sé). La verdad es que creía que estaba bien... hasta que dejamos de impedir un nuevo embarazo (creo que no es exactamente lo mismo que buscar, luego explicaré porqué).

La decisión fué casi al final del ciclo, por lo que no había riesgo, pero empecé a sentir varios síntomas -nauseas, dolor de pechos, dolor de coxis, salida de calostro...-.
No consideraba que hubiese riesgo, ese mes no, pero tan extraño me parecia todo que por un momento me ilusioné, y cuando me bajó la mentruación, y supe que no, que no estaba, me sentí fatal por haberme alegrado. Por querer volver a intentarlo, como si con ello estuviese traicionando a Elric... Debo estar loca, pero he hablado ciento de veces con él, hasta le he pedido permiso...

Ahora sé que Elric no podía vivir, que el higroma quístico que le vieron en la biopsia de corion se habia agrandado demasiado y que no me debían quedar más de un par de semanas de embarazo. Supongo que ese conocimiento nos ayudó a decidir volver a buscar, y el hecho de que no creo que el tiempo cambie nada, solo empeore las cosas.
Al irse la menstruación y seguir con las molestias en el pecho izquierdo, super inflamación, y calostro, fuí a la ginecóloga. Allí, mientras esperaba a que me atendiesen en la misma sala en la que me dieron la noticia, mientras las administrativas hablan de un caso similar al mio, y no tenia nadie con quién distraerme, algo se rompió en mi y no aguanté. Creo que surgió el dolor que había escondido de mi misma. el luto que no había pasado, la rábia, el revivir el recuerdo... Comenzó como ansiedad, como que no podía respirar. claustrofóbia, necesitaba salir... entonces me llamaron, y rompí en llanto. Bueno, de eso, la ginecóloga, que debe creer que estoy como una cabra, me derivó a la psicóloga a la que no llegué a ir. Me toca el dia 3. Y el viernes eco para ver que le pasa a mi pecho...

Así que durante este mes he pensado mucho, he comprendido que sí, lloré la culpa, pero jamás me despedí, me deshice de él y luego no le dejé marchar. Que injusto... Pero bueno, ahí estoy, creo que este verano han pasado tantas cosas que no he tenido tiempo de llorar, de gritat, nada, y ahora ando en ese punto, en la despedida, y a la espera de que nuestro cuarto hijo venga a nosotros, si quiere (e intuyo que se tomará su tiempo) para darle a mi nena el o la heman@ que se merece.

Antes he dicho que no buscamos, si no que no entorpecemos su llegada... la diferencia supongo que es la alegría. En nuestro caso es indiferéncia o miedo, no sé... el miedo a ilusionarnos, el miedo a un positivo, que aunque lo queramos no es menos aterrador... el miedo a que la historia se repita o suceda algo distinto, visto que no somos amigos de las estadísticas...

Este més, hace un año, comenzábamos la búsqueda, una búsqueda real... y de verdad que no se siente igual. Pero no confio lo suficiente en mi cuerpo para dejarle esperar...

Vaya chapa os he metido eh? Besos a todad y de verdad, me he acordado mucho, pero se me hacía cuesta arriba enfrentarme a la realidad... Pasito a paso

Hola Bárbara.

Siento todo lo que estáis pasando.
Y comprendo que por mucho que una quiera manejar la situación, el duelo a veces es algo que tiene sus propias reglas, y a veces, parece no irse definitivamente.
Espero que pronto llegue a vuestra vida un pequeño/a que definitivamente decida quedarse. Y qué pena que el pobre, sin culpa ninguna, sea recibido en medio de miedos e incertidumbre, pero es más que comprensible. Te deseo, que ese pequeño crezca y día tras día vaya atenuando todos esos malestares, para que podáis vivir de nuevo la ilusión de una nueva vida.

Me he acordado mucho de tí (sin apenas conocerte). Cuando todo ocurría, en mis 20 semanas de embarazo le diagnosticaban a mi bebé Arteria Umbilical Única. Se asocia (que no está directamente relacionado) a ciertos síndromes, aunque también puede ser un hecho aislado, como parece ser finalmente.
Mi marido y yo, tras un largo y agotador proceso de búsqueda de este bebé desestimamos realizar el triple screening (ya que la ecografía de la semana 12 se veía perfecta), y decidíamos vivir un embarazo tranquilo; tras diagnosticarlo, te recordaba, y estuve confusa varias semanas pensando si un triple screening de riesgo podía haber cambiado el curso de mi embarazo, para bien o para mal...

Al día de hoy, en la recta final de mi embarazo, el miedo a algo inesperado sigue presente, pero como nada lo confirma ni lo descarta (todo parece normal), prima la alegría de nuestro inminente encuentro.
Sin embargo, no dejo de tener en cuenta tu caso y el de muchas familias que se ven tomando decisiones difíciles, sin llegar a empatizar del todo, pues creo que la situación me supera y no puedo decir ni juzgar. Merecen mi máximo respeto y apoyo.

Un saludo y bienvenida!

Me alegro de que el embarazo esté yendo bien, y que parezca que lo del cordón ha quedado en susto.
Auquí, el triple screening no es algo que se acoja, te lo hacen siempre, es la ecografía de las doce semanas.

Entiendo completamente que no la hayas querido hacer, recuerdo tu situación. Yo sé que de haber sido mi primer hijo la decisión hubiese sido distinta, y lo sé de verdad porqué el tema surgió en el embarazo de Naya (a la hermana de un amigo le pasó lo mismo que a mi esta vez, y estábamos del mismo tiempo). En cualquier caso... no hubiese cambiado nada... realmente no iba a vivir, y lo duro, es que yo lo sabía desde el principio, porque las madres tenemos ese sexto sentido, no logré sentir esa comexión que tube con mi hija desde la concepción. Me obligaba a hablar con él, y no comprendia porque no me salía natural. Solo conseguí esa conexión que intenté forzar desde el principio al final, dias antes de que me diesen la noticia.

Y no hablo de querer o no querer, es complicado... No conseguía subirme a "la nuve del embarazo" y me culpaba por ello. Y si conseguí conectar y subirme a esa nube, fué porqué empezó a moverse en mi, a decirme "estoy aquí". Una semana duró la nuve.

Tengo un trato con el siguiente, si quiere venir, trataré de disfrutar cada momento, pues no sé cuanto durará y será mi último boleto. Si no viene, o viene o se va, me retiro... Estoy de negociaciones con el universo (pensareis que estoy loca.... pero ¿con quién negocio entonces?... y además, me debe una muy gorda después de lo que me ha hecho)
Es complicado tener esa sombra, vivir con ese miedo... pero si algo no falta en mi casa es amor, de eso, al que quiera venir, no le faltará. Y si no tiene que venir, al menos, que sea porqué deben llegarle a quién se lo merece desde hace tiempo.

Bárbara, cuánto he pensado en ti!. Pensaba en cómo estarías, en sí habrías pasado el luto, en lo duro que habría sido...

Admito que admiro tu fuerza, que no sé si yo estaría menos loca que tu (estaría más seguro). Toca llorar, despedirte, cerrar ese capítulo y escribir la nueva historia, tal vez Erick se decida a venir en un cuerpo en mejores condiciones, o a lo mejor os vigila y cuida desde otro plano (sale mi vena mística).

Te mando un abrazo inmenso y espero que para cuando llegue ese embarazo, haya sanado la herida lo suficiente para que puedas disfrutar de esa etapa maravillosa.

Besos.

Te leí anoche, pero era tarde y desde el móvil no me gusta contestar según que cosas, y esto merece un rato de mi tiempo y de un buen teclado

Es algo muy duro lo que has tenido que pasar, yo me hubiera vuelto majareta en tu situación, tomar esa decisión, vivir el luto, es duro, muy duro, pero lo peor es el sentimiento de culpa que queda después, aun a sabiendas de que tomasteis la decisión más acertada en aquel momento.

Tómate un tiempo para llorar, para despedirte (nunca nos despedimos del todo) haz lo que sea necesario, y si viene otro embarazo pues a coger el toro por los cuernos, con miedo, con respeto, como quieras tomarlo, quien sabe, a lo mejor no tardáis tanto, a lo mejor llega y te sientes tranquila y serena, el mundo hormonal de una embarazada es todo un misterio.

Tienes todo mi cariño amiga, y espero que pronto veas disipado ese dolor, al menos para poder seguir adelante.

Un abrazo de mamá osa