¿rabietas? ¿celos?

Hola mamis, quería contaros algo que me tiene dando vueltas al coco
Martin tiene un comportamiento que no es habitual en él. Esta de peor humor, muy protestón por todo, lloroso e irritable y demandando mucho.
Yo esto lo he atribuido al nacimiento de la hermana, y lo encuentro normal. Su padre se ha volcado con él, tanto en su cuidado como en los juegos y yo intento estar con él todo lo que puedo, aunque a veces me es imposible atenderle.
La situación ha empeorado desde que su hermana estuvo ingresada unos días en el hospital y yo con ella. Como fue algo inesperado, no tuve tiempo de explicarle que me iba ni a dónde. En 5 días solo me vio un par de horas, un día que me lo trajeron a la puerta del hospital e intente explicarle porque me había ido y que iba a volver. Esos días estuvo la mayor parte del tiempo con sus abuelos y lo llevo bien, también se encargó de el su padre, pero el pasaba la mitad del día conmigo en el hospital.
Al volver del hospital he sentido que de alguna manera me rechaza, se ha apegado mucho a su padre y ahora es a él a quien reclama, esto también me parece normal y me parece bueno que estreche los lazos con su padre. Sin embargo me da la impresión de que esta enfadado o dolido conmigo.
El otro día despertó de la siesta que hacía en el sofá, yo estaba en otro sillón dándole el pecho a Amanda, y comenzó a lloriquear. Como no podía acudir le dije que viniera conmigo, él me miraba y lloraba con pena, como esperando a que yo fuera a socorrerle. En este estado bajo una pierna del sofá, pero no atino a poner la otra y se cayó. Entonces comenzó a llorar más fuerte como con mucha pena y rabia, o así lo entendí yo. A mí me pareció que se estaba sintiendo traicionado y abandonado (o tal vaz me hizo revivir mi propio abandono, no se si a eso se refería Xime en su post, que intentare contestar en algún momento. Deje a la nena, y cuando intentaba acercarme a él a consolarle me rechazaba.
He doblado mis esfuerzos por “reconquistarle” y hemos tenido algunos ratos buenos.
Anoche se acostó a su hora, subí yo a dormirle y lo hizo sin problemas. Un par de horas después se despertó llorando con fuerza y con rabia. Comenzó su padre a consolarle su padre, para él una forma de hacer que no llore es hacerle reir y comenzó a jugar con él. Yo soy de la opinión de que cuando el niño llora de esa manera está expresando algo y no me gusta reprimirlo. Al menos a mi, cuando estoy triste, me gusta soltar mi pena, y luego ya encuentro momento para reirme, pero necesito descargarme primero y el hecho de desviar mi atención hacia otra cosa (también lo hace conmigo) me hace no sentirme escuchada y así pensé yo que ocurría con Martín, así que le pedí que le dejase descargarse, acompañándole, ofreciéndole los brazos por si los necesitaba, pero no forzándolo, mientras yo estaba con la niña dándole pecho e intentando que durmiera.
Pues bien, esta situación dura dos horas largas, dos horas llorando y chillando. El papi volvía a su técnica, y yo le volví a pedir que le dejara desahogarse, hasta que se durmió la niña y me hice yo cargo de él (el papi se dio media vuelta en la cama y se durmió o hizo como si tal, si volver a decir nada) . Lloraba con rabia, chillaba, deambulaba por la habitación y por el pasillo. Yo trataba de ponerme a su misma altura y estar cerca de él, la rabia parece que se fue pasando (aunque volvía a rachas), pero seguía llorando y a mi me daba la impresión de que se había acelerado tanto que ya no sabía parar. En fin poco a poco se fue calmando y se durmió. Yo pensé que la tormenta había pasado, pero se ha despertado varias veces, en las que lloriqueba y se bajaba de la cama, peor he podido reconducir la situación más o menos bien y volver a “ dormir”, hasta que finalmente a las 6 de la mañana ha empezado otra vez como el inicio de la noche. En esta etapa yo ya estaba pensando que tal vez mi teoría no fuese correcta ¿y si le dolía algo? ¿tal vez algún diente nuevo? (nunca se ha puesto así), me sentía superada, incapaz de saber que le pasa, como calmarle, como manejar esta situación. A las 6 y media ha sonado el despertador de papa y cuando se ha levantado ha dicho algo como que “no le pasa nada, hay que dejar que se exprese”, le ha dado un beso al niño y se ha ido. A mí eso me ha dolido.
Cerca de las 8 se ha dormido.
Aunque Martín está empezando a revelar su carácter, nunca ha tenido rabietas ¿Es esto una rabieta? ¿ en mitad de la noche, sin causa aparente? ¿puede una rabieta durar más de dos horas sin parar de llorar?
¿Está mal la estrategia del papi? ¿Soy yo demasiado controladora al intentar imponer mi teoría? O debo dejar que el encuentre su propia forma de relacionarse con el niño? ¿ no vamos a confundir mas al niño si cada uno actúa de una manera?
¿Cómo podemos hacer para mejorar la situación en casa? ¿Se pasan alguna vez los “celos” (aunque no me gusta esta palabra)? O ¿Cuánto tiempo tardara Martín en darse cuenta de que aunque las cosas no volverán a ser como antes hay Amor para todos?
En fin, me siento fatal, espero vuestra ayuda, a ver si me dais una mirada diferente al tema.
GRacias

Hola guapa, escribo un poquito, aunque no sea para darte respuestas
Con Paula yo he notado que ahora (Kai cumple hoy 5 meses) está bien. Antes, parecía que estaba bien, pero era muchas veces forzado. Digamos que aparentaba amor y que estaba contenta, pero veo la diferencia ahora con el amor que muestra a su hermano. Creo que ahora ya sí se ha adaptado a la situación, nueva para todos.
Es muy duro cuando son peques. Paula tiene 27 meses y me necesita muchísimo. Pero como es mayor, esperamos que comprenda que tiene que esperar si Kai tiene que comer por ejemplo. Y es pequeña en realidad.
La edad influye, claro que sí, porque no es igual la capacidad de expresar con palabras con 2 que con 5 años. Y es lógico que tiren más del llanto porque es su manera de expresarse.
El cómo hacerlo mejor. Ni idea. Yo me he volcado en hablarle y explicarle las cosas. También en sacar tiempo para ella a solas. Dejar que el papi se encargue de Kai aunque a veces el peque proteste un poco (el papi tiene que encontrar su manera de relacionarse con él también, que con Paula lo tenía más fácil, ahora se encarga más de ella y muy poco de Kai) y jugar con ella, enseñarle cosas nuevas, etc.
Yo cuando empieza "a modo rabieta"(que no sé si son o no, en realidad), la abrazo, le digo que la quiero, le explico lo que pasa, le pregunto qué le pasa, porqué está así, y la distraigo.
Encontraréis la manera de funcionar todos bien. Habla mucho con Martín, él se adaptará con el tiempo, y el amor por su hermana le hará llevar todo mucho mejor. Es que mami antes era de ellos y ahora nos tienen que compartir. Es la parte "mala" de tener hermanos, pero cuando ves que lo pasan bien juntos, eso ya compensa
Un besote!!!

Raquel, que duro debe ser, me pongo en tu piel y ya lo estoy sufriendo.

Recuero un post de Blanca, que no voy a olvidar jamas, me parece perfecto de aplicar en tú caso, porque ella lo aplico cuando nació Sara y Alba resentía la llegada de su hermana. No encuentro el post, voy a buscarlo.

Blanca nos contó al respecto, cuando nació Sara y la actitud de Alba, recuerdo que decía: "mientras mas pronto se de cuenta de que mamá sigue estando ahí para ella, mas pronto volverá a ser la misma de siempre."

EStoy segura que es dificil, pero puedes alimentar a la bebe y dejarla con papá y hacerte cargo tu de Martin, antes de la llegada de su hermana siempre ha sido asi verdad??

Trata de darle toda la atencion posible, a priori, veras que en breve tu niño vuelve a ser el mismo, no puedo extenderme, volveré después.

Besos y mucha paciencia.

Hola Raquel, ay!, que duros son los comienzos!
A mi no me quedo mas remedio que aplicar el metodo padre, Luis se encarga de dormir a Marco, incluso muchas noches de bañarlo y darle la cena. Al principio intente yo, abarcarlo todo, es decir, ocuparme de Zaira y seguir arendiendo todas las necesidades de Marco, pero, me fue imposible.
Yo, tengo a mi favor, que Marco es ya un niño de 4 años, que entiende ya muchas cosas y con el cual hemos podido razonar bastante. El metodo padre ha sido un exito: Marco se ha empadrado y, aunque pase los dos primeros meses, sintiendome "mala madre", por esta especie de "abandono" hacia mi niño, se, que todo esto a Luis, mi marido, le ha servido para, por fin, ser participe en los cuidados y educacion de Marco, aspectos que yo habia controlado casi en su totalidad. Ahora hacen cosas de chicos, yo he tenido que delegar en el papa y confiar ciegamente en sus metodos.

Fijate, me gusta el metodo de tu marido. La distraccion ante el llanto y las rabietas. La risa es una magnifica via de escape!, siiii, Raquel, reir mejor que llorar. Me gusta y es su metodo. Su forma de hacer que a Martin se le pase su enfado.

Celos. Aunque nos cueste reconocerlo, los tienen. Es su forma de decir:ey, aqui estoy, no te acuerdas?. Marco se volvio repentinamente muy sensible, dolido por cada cosa que le deciamos. Cuando llegaban visitas, hacia lo imposible para llamar la atencion. Sus celos se manifestaron por mostrarse super besucon y baboso con su hermana; y muy posesivo. No queria que nadie la cogiese ni le hablase. "Zaira es, mia", decia.

Seis meses despues, todo esta ya tranquilo. Todo empezo a tomar tranquilidad hace tres meses.
Marco, ya no tiene celos, ni llama la atencion. Ha vuelto a ser mi niño de siempre.

Martin llora y berrea porque es muy pequeño para verbalizar lo que siente. Ante esto, dale mucha contension, mimos, abrazos, sonriele, besalo, jugad los tres, aunque Amanda es pequeñota, que el vea que no es prohibida, que piede interactuar con su hermana, tocarla, besarla, hablarle. En breve, veras como Amanda le rie a Martin todos sus movimientos, lo buscara y se dedicaran miradas complices, picaras...

Habra dias estupendos, relajados, otros muy complicados, de alta demanda.

Raquel, delega en el papa y deja que sea participe, que emplee sus trucos, que ejerza de papa.
No te mortifiques por la falta de tiempo con Martin( a mi la falta de tiempo con Marco me hizo sufrir mucho ), lo iras recuperando, ya veras.

Ahora que Zaira duerme menos por el dia, juego mas con el, con ambos.

Todo pasa. Todas las piezas van encajando, poco a poco.

Se iran los celos, se ira tu angustia. Si Martin te ve feliz, el tambien lo sera. Si Martin te ve triste y agobiada, el te lo mostrara igual.

Besitos y animo!

Muchas gracias por los consejos y especialmente por los ánimos. Supongo que pasará , pero a veces me veo desbordada y lo que más miedo me da es causar alguna herida irreparable, pero supongo que eso es mas paranoia mía que otra cosa.

Ayer se despertó a las 11 y continúo llorando un par de horas más. Se agarra a mis piernas para que le coja, no me deja caminar, y aunque intento hacerlo cada vez que puedo a veces es que es imposible. Tampoco se deja portear, he intentado colocármelo a la espalda, pero no quiere, no sé si será por el calor o será definitivo, es una pena, pues hace apenas un mes todavía le llevaba.

El padre se ha volcado un montón, ya durante el embarazo comenzamos a alternarnos para dormirle y se duerme bien con cualquiera de los dos. También hablé con él y bueno, en el fondo tampoco sé si es mejor mi manera de hacer las cosas, ambos vamos probando para ver que nos funciona.

Yo cuando empieza "a modo rabieta"(que no sé si son o no, en realidad), la abrazo, le digo que la quiero, le explico lo que pasa, le pregunto qué le pasa, porqué está así, y la distraigo.

Yo hablo con el y le digo que le quiero, pero aunque le pregunte no me puede contestar, pues no habla, pero bueno yo seguiré explicándole.

"mientras mas pronto se de cuenta de que mamá sigue estando ahí para ella, mas pronto volverá a ser la misma de siempre."

Espero que ese día llegue pronto. Sé que dentro de unos meses esto habrá pasado y tendremos otros retos por superar. El caso es que como madre estoy muy mal acostumbrada, pues Martín siempre ha sido un niño tranquilo y con buen carácter, que se consolaba fácilmente con la teta, dormía bien, come bien y no ha dado muchas complicaciones. Supongo que ahora se junta el hecho de estar en una edad más difícil con lo de la hermana.

EStoy segura que es dificil, pero puedes alimentar a la bebe y dejarla con papá y hacerte cargo tu de Martin,

Procuro hacerlo así, sik la niña esta comida y tranquila procuro acompañarle yo a dormir, o bañarle…, lo mas difícil es cuando estoy yo sola con los dos, que no siempre puedo hacerle el caso que el quiere, como he dicho se me agarra a las piernas y a veces no puedo cogerle.

En fin, ayer fue un dia crítico, espero que hoy se den mejor las cosas, pero lo cierto es que yo también me siento mas tranquila y eso también influirá-

Un beso