En un mes se me acaba mi permiso por Lactancia :(

Como me cansa que mucha gente venga a la casa de uno a dar su opinión en vez de ayudar o, por lo menos, sacar en la conversación sólo los alagos, del estilo: ¡Hay que ver qué valiente eres, como están ahora las cosas de mal y con el trabajo tan bueno que tenías, y el dinero que ganabas, lo dejaste todo para cuidar de tu familia, eso tiene mucho mérito!

En fin, eso me gustaría a mi que me dijeran, por desgracia he tenido que oir exactamente lo contrario, comentarios del tipo: "si no puedes quejarte, estás como una reina, llevas horario de bebé, puedes acostarte cuando la niña duerme y si no quieres hacer la casa no la haces y en paz"

Jo, que a gusto me he quedado

Hola chicas, vuelvo al mundo cibernético, y aprovecho para unirme al club de las mamás y trabajadoras, y poco reconocidas.

Por cierto, Cris, he de reconocer que yo antes era de las que pensaba que las que se quedaban en casa sin trabajar (fuera) para cuidar de sus hijos eran unas comodonas... (yo misma he cambiado tanto de opinión sobre tantas cosas relacionadas con los niños y su entorno, que hoy en día ni me molesto en discutir opiniones diferentes de quienes no los tienen. Lo de los niños es de las cosas que HAY que tener experiencia siquiera para opinar -y ni siquiera todas las experiencias son iguales y valen para todos-). Después de saber lo qué supone cuidar de un bebé... Ahora opino todo lo contrario: tiene más mérito que nada pasarse 24 h rodeada de niños sin un respiro u oxigenación... Lo fácil es irse a la oficina a trabajar. lo difícil es quedarse en casa a atender a los niños...

Lamentablemente, poca gente es capaz de verlo...

En fin, respecto al tema de la conciliación, la "liberación" de la mujer, la vida profesional... también he cambiado de opinión. Antes era de las que creía que el éxito y conquista de las últimas generaciones (femeninas) era el mercado laboral... ahora lo que creo es que la conquista pendiente, el verdadero "feminismo" pasa por la conquista del hogar (y la familia) por parte de los hombres. Siempre me ha encantado mi trabajo. Pero no es comparable con lo que me encanta mi hija. Me parece una renuncia mucho más dura renunciar a mi hija, durante un breve tiempo -y que no volverá, pues nunca volverá a tener 4 meses, 2 años ó 5-, que renunciar a un trabajo durante unos años. Al final, la vida laboral que nos espera es muy larga -visto el panorama, unos 35 ó 40 años en total- y hay tiempo para todo tipo de etapas. Unas con más dedicación y entusiasmo, y otras, con menos. Creo que en el trabajo pueden volver a surgir oportunidades en el futuro, a pesar de dejar pasar ahora algún tren. El tren de la infancia de nuestros hijos no vuelve.

Es por eso que me da una pena tremenda el planteamiento masculino general. Eligen generalmente (o en general, les viene dada la elección, por lo que realmente no hay elección) el trabajo, antes que la familia. Y eso sí me parece una gran pérdida. Cuántos momentos irrepetibles se pierden los papás de sus hijos... Y lo peor de todo, es que no son ni medio conscientes. Yo sí soy consciente de lo que pierdo en lo laboral, con mis planteamientos familiares (baja maternal, reducción de jornada...). PEro la mayoría de los hombres ni huelen lo que se pierden al alargar sus jornadas laborales hasta lo indecible, a costa de no ver crecer a sus hijos, de no compartir con ellos momentos cotidianos, deliciosos...

Realmente... ¿quiénes somos más libres? Yo lo tengo claro. Mis elecciones (mejores o peores, con renuncias o sin ellas) han sido mías. Las de la mayoría de los papás que conozco... son patrones establecidos por el sistema de vida actual. Cuando uno quiere elegir la familia, el mundo se pone en su contra (tengo la experiencia de mi marido, que cogió 6 meses de excedencia para cuidar de Alba. Lógicamente, ha pagado su peaje laboral, pero sus momentos con ella le quedan...)

Blanca B escribió:Hola chicas, vuelvo al mundo cibernético, y aprovecho para unirme al club de las mamás y trabajadoras, y poco reconocidas.

... ahora lo que creo es que la conquista pendiente, el verdadero "feminismo" pasa por la conquista del hogar (y la familia) por parte de los hombres. Siempre me ha encantado mi trabajo. Pero no es comparable con lo que me encanta mi hija. Me parece una renuncia mucho más dura renunciar a mi hija, durante un breve tiempo -y que no volverá, pues nunca volverá a tener 4 meses, 2 años ó 5-, que renunciar a un trabajo durante unos años. Al final, la vida laboral que nos espera es muy larga -visto el panorama, unos 35 ó 40 años en total- y hay tiempo para todo tipo de etapas. Unas con más dedicación y entusiasmo, y otras, con menos. Creo que en el trabajo pueden volver a surgir oportunidades en el futuro, a pesar de dejar pasar ahora algún tren. El tren de la infancia de nuestros hijos no vuelve.

Realmente... ¿quiénes somos más libres? Yo lo tengo claro. Mis elecciones (mejores o peores, con renuncias o sin ellas) han sido mías. Las de la mayoría de los papás que conozco... son patrones establecidos por el sistema de vida actual. Cuando uno quiere elegir la familia, el mundo se pone en su contra (tengo la experiencia de mi marido, que cogió 6 meses de excedencia para cuidar de Alba. Lógicamente, ha pagado su peaje laboral, pero sus momentos con ella le quedan...)

Ayyy Blanca, pero qué razón tienes, yo también renuncié a un buen trabajo, y por circunstancias de la vida mi marido fue despedido hace muy poco. Ha pasado de echar una jornada de 13 horas diarias a pasar el día en casa con nosotras.

Esto es un gran inconveniente para la economía familiar, pero le ha ayudado mucho a valorar lo que tiene: esos momentos irrepetibles con los hijos que jamás vuelven. Al fin y al cabo algo malo siempre trae algo bueno.

Mi marido es de los que ahora dice: "y lo que estoy yo disfrutando a mi hija...", "jo, pues sí que hay que tener paciencia para llevar el día a día con la niña...", que está en la típica época de las rabietas.

No descarto volver al mundo laboral en breve, de hecho, si mi marido no encuentra algo pronto, voy a ser yo la que salga a buscar algo porque así mucho tiempo no podemos seguir, será muy duro, pero lo haré por mi hija, sé que al cuidado de su padre estará bien atendida.

Atenea escribió:
¿Has probado con una simple cañita o pajita? También hay vasos que vienen con una especie de cañita o pajita incorporada... Eso sí, mancharse se manchan... Al menos el mío sí...

Hola Atenea:
Pues yo he probado casi casi todos los vasitos que venden por aquí, ella de por si ni los toca... Lo bueno es que mi suegra no se complica y están las dos unas maestras en tonar la leche con cereal con cuchara... En fin, desde que lo hemos asimilado nos va mejor, si quiere ella servirse pues tiene su teta y mientras tanto a "tomar leche" con cuchara jijiji...

Blanca B escribió:Hola chicas, vuelvo al mundo cibernético, y aprovecho para unirme al club de las mamás y trabajadoras, y poco reconocidas.
Tiene más mérito que nada pasarse 24 h rodeada de niños sin un respiro u oxigenación... Lo fácil es irse a la oficina a trabajar. lo difícil es quedarse en casa a atender a los niños...

Hola Blanca, siento no estar de acuerdo con lo que tu dices, si bien pasar todo el día con los niños resulta súper cansado, lo otro para nada es "fácil", tener esa rutina implica que aparte de tener tu mente 100 % en tu pequeño tienes que cumplir con las labores para las que te pagan, sacrificar mucho mas el sueño, ir a trabajar sin dormir a veces y brindar tiempo de mayor calidad a los hijos y cuando crees que no te queda mas tiempo, atender el hogar y al marido en caso de tenerlo.. Pienso que para una madre tanto que trabaja como que se queda en casa es sacrificado hacerlo...

Blanca B escribió:
Siempre me ha encantado mi trabajo. Pero no es comparable con lo que me encanta mi hija. Me parece una renuncia mucho más dura renunciar a mi hija, durante un breve tiempo -y que no volverá, pues nunca volverá a tener 4 meses, 2 años ó 5-, que renunciar a un trabajo durante unos años. Al final, la vida laboral que nos espera es muy larga -visto el panorama, unos 35 ó 40 años en total- y hay tiempo para todo tipo de etapas. Unas con más dedicación y entusiasmo, y otras, con menos. Creo que en el trabajo pueden volver a surgir oportunidades en el futuro, a pesar de dejar pasar ahora algún tren. El tren de la infancia de nuestros hijos no vuelve.

El tema de renunciar o no a un trabajo supone en su momento, mucho mas de si te gusta o no, a parte está la parte económica, muchas madres son el ùnico sustento de su familia y obviamente en esos casos no hay opciòn.

Nuevamente discrepo contigo, con respecto a lo de posibles oportunidades en el futuro, al menos aquí en mi país eso es muy duro, con decirte que aquí en la mayoría de los anuncios para trabajos ponen como tope de edad los 35 años.

Yo se que el tren de la infancia de nuestros niños no volverá es por eso que por mas duro que sea, para quienes trabajamos, nos implica brindar a los pequeños la mayor atención posible cuando estamos y dedicarnos al 100% de ellos en nuestro tiempo libre.

Blanca B escribió:
Las de la mayoría de los papás que conozco... son patrones establecidos por el sistema de vida actual. Cuando uno quiere elegir la familia, el mundo se pone en su contra (tengo la experiencia de mi marido, que cogió 6 meses de excedencia para cuidar de Alba. Lógicamente, ha pagado su peaje laboral, pero sus momentos con ella le quedan...)

Tienes razòn, el sisitema actual no valora en nada la importancia de la familia:( ... Que lindo regalo que tu esposo le ha dado a tu hija, aquí es muy difícil conseguir permiso por ese tiempo, en todo caso mi esposo tomó un mes entero de vacaciones para quedarse con Savannah cuando yo me reincorporé y obviamente fue un momento muy duro, pero se hizo muy llevadero ya que yo sabía que mi hija se quedaba en las mejores manos luego de las mías

Hola Gabriela, tienes razón en tus matizaciones.

Escribí un poco deprisa y no pude precisar demasiado...

Cierto es que cuando dije que lo "fácil" es irse a trabajar, el término que usé no fue muy afortunado.

Desde luego que no es nada fácil irse a trabajar y además, tratar de cuadrar tiempos y energías para cuidar de un bebé. Yo me reincorporé a los 5 meses de mi hija, aunque afortunadamente ahora sólo trabajo por las mañanas (de 8 a 3, en jornada reducida).

Lo que quería decir es que, al menos a mi me pasó, se me ha hecho en muchas ocasiones más duro el pasar días enteros con mi hija, sin contacto con más gente (vivo en madrid, y no tengo familia cerca. los amigos, obviamente, tienen su vida diaria yno es tan fácil verse), agotada tras muchos meses sin dormir, con la responsabilidad permantente de atender a una personilla que depende exclusivamente de ti, y no te da ni un respiro, con sus momentos mejores, peores, más o menos demandantes, más incluso que pasar largas horas en la oficina, teniendo que dar respuesta a mis asuntos laborales.

La soledad que he sentido ejerciendo de madre ni de lejos se parece a la soledad que había sentido nunca. De alguna manera, el tiempo en la oficina, muchos días, aún siendo agotador en otros sentidos, me servía de desconexión, cambio de aires, refresco mental, intercambio social.

Es por eso por lo que decía que, para mi y tras mi experiencia, he aprendido a valorar y mucho la dureza de ejercer la maternidad con pocos apoyos (los de mi marido sí, afortunadamente, pero con el poco tiempo que le resta su trabajo). Para mi, el reincorporación laboral ha supuesto más un alivio, un "recuperar un poco esa parcela de tiempo para mi", que otra gran obligación añadida (insisto, sin mensopreciar la exigencia en tiempo y energías que supone el trabajo).

No sé si me explico. Eso es lo que quería decir cuando comenté que lo "fácil" es volver a trabajar... (reconozco, otra vez, lo inapropiado del término).


Respecto a la elección: Trabajo/familia.... sé que no es fácil. En cuanto a la parte económica, si bien es muy fácil generalizar (y equivocarse seguro), creo que en general, tenemos creadas muchas obligaciones económicas innecesarias, que ni nos planteamos. Y respecto a las oportunidades, qué duda cabe que no es fácil. Ni allí, ni aquí. Está demasiado establecido el patrón: o quemo los cartuchos laborales pronto, o se me pasa el tren. Por eso yo creo que hay que empezar a romper esquemas y plantearse alternativas. Seguir el tren del guión actual es perpetuar el estilo que precisamente rechazamos.

No sé, cada uno, lógicamente, toma sus decisiones, en sus circunstancias y con sus criterios. Pero soy de la opinión que, en general, tomamos muchas decisiones condicionados por el miedo a lo que podría ser, sin certeza absoluta de que tenga que ser así.

En fin, que no quiero teorizar más. Yo pago gustosa mis peajes laborales, consecuencia de mi reciente maternidad, por la certeza de haber sido una elección mía, meditada y sopesada. confío en que esta situación será transitoria y tendré ocasiones múltiples, a futuro, de volver a retomar el ritmo laboral que yo decida. Este es mi planteamiento. Ya te contaré, a futuro, si he acertado mucho o poco con mis previsiones!!!

Por encima de todo, y para terminar... mucho ánimo con tu vuelta!

La soledad que he sentido ejerciendo de madre ni de lejos se parece a la soledad que había sentido nunca. JOOOOO, como me suena.

Lo sola que yo me he sentido en innumerables ocasiones....., he pagado el peaje laboral y aún lo estoy pagando, pero no me arrepiento de nada.

Algún día podré retomar el tren, y si lo he perdido pa siempre, pues bueno, cogeré otro distinto, que a ninguna se nos caen los anillos.

Besitos y muchos ánimos para afrontar lo que viene.

Hola chicas,
Puede ser duro tanto la opción de quedarse en casa si a una no le llena en absoluto, como la de renunciar a la crianza por un trabajo. Depende de las prioridades y de las necesidades de cada una. La situación de dos personas no siempre es comparable pues depende de si hay ayuda en casa o se puede permitir pagar una ayuda, o de la situación económica o de las inquietudes laborales de cada cual. Lo más importante es llegar a un "acuerdo" contigo misma. Ufff.... lo más difícil de lograr.

Suerte a todas nosotras con nuestras decisiones. Yo creo que lo mejor es pensar que todo lo que "digo diego" (que decimos aquí) osea que somos libres de cambiar de opinión si nos sentimos diferentes!!! ¡Hay que disfrutar siempre del presente!

Besos,

nuri

Blanca B escribió:

... al menos a mi me pasó, se me ha hecho en muchas ocasiones más duro el pasar días enteros con mi hija, sin contacto con más gente (vivo en madrid, y no tengo familia cerca. los amigos, obviamente, tienen su vida diaria yno es tan fácil verse), agotada tras muchos meses sin dormir, con la responsabilidad permantente de atender a una personilla que depende exclusivamente de ti, y no te da ni un respiro, con sus momentos mejores, peores, más o menos demandantes, más incluso que pasar largas horas en la oficina, teniendo que dar respuesta a mis asuntos laborales.

Hola Blanca, esto sucede porque es más difícil expresar nuestras ideas de forma escrita, que manteniendo un diálogo , Muchas gracias por ampliarte en tu comentario, al verlo así, pues estoy totalmente de acuerdo contigo, yo también pasé los primeros meses de Savannah muuuuy cansada, ella tuvo cólicos desde el principio, siempre estaba irritable, aun si estaba en el brazo y lloraba mucho, vomitaba, en fin, fue todo muy duro, ya casi a los 4 le diagnosticaron su alergia a la PLV que había sido el motivo...Cuando me reincorporé, si bien fue muy duro dejarla, porque no comía nada mientras yo no estaba y me llamaban cada dos por tres a darme quejas, debo confesar que si fue un alivio poder salir a darme un respiro...

Blanca B escribió:
La soledad que he sentido ejerciendo de madre ni de lejos se parece a la soledad que había sentido nunca. De alguna manera, el tiempo en la oficina, muchos días, aún siendo agotador en otros sentidos, me servía de desconexión, cambio de aires, refresco mental, intercambio social.

Nada mas cierto que tus palabras, recuerdo que antes de tener a mi hija, mis familiares cercanos me insistian tanto en que tengamos un bebé, ya el rato de los ratos (nadie asomó a darme una mano, ahora se que no tenían porque hacerlo) la pasé muy mal, bueno las primeras tres semanas vino mi hermana a ayudarme pero luego tuvo que salir del país y de ahí hasta que Savannah cumplió 7 meses estuve sola, sin ningún apoyo, ni de mi madre porque también trabaja, ni de nadie; y las pocas veces que alguien vino, solo fue para criticarme lo que hacía o dejaba de hacer, para hacerme dudar mas fuertemente de mi capacidad para ser madre, de acabar con lo poco que quedaba de mi instinto con teorías tan falsas....

Luego a la par, que vino mi suegra del exterior a darme una mano con mi hija mientras trabajo, encontré este hermoso foro! Desde ahí todo ha sido mucho mas llevadero, aún tengo dudas y miedos pero disfruto mucho de cada experiencia con mi hija, la disfruto mucho a ella como personita: cuando llora, cuando juega, cuando ríe si está enferma o feliz, da igual, me he serenado bastante y se que todo pasa, así como lo malo, los momentos buenos también y los quiero atesorar mucho en mi mente y en mi corazón...

Esta nueva experiencia me ha ayudado a entender que mientras mi esposo y yo caminemos hacia el mismo horizonte, todo lo demás sobra... Y como tu dices: "he aprendido a valorar y mucho la dureza de ejercer la maternidad con pocos apoyo", yo también creo que lo he conseguido.

Un beso y muchas gracias por tu ánimo!!

crisyvictoria escribió:La soledad que he sentido ejerciendo de madre ni de lejos se parece a la soledad que había sentido nunca. JOOOOO, como me suena.

Lo sola que yo me he sentido en innumerables ocasiones....

Mi querida Cris, como te debes dar cuenta la soledad en la carrera de ser mamás, la sentimos mas de una de nosotras (sea que trabajemos o no), sin embargo, el tener este espacio en donde nos podemos consolar, aconsejar, apoyar, reir y aprender, es algo que ya quisieran muchas otras mamás...

crisyvictoria escribió:

., he pagado el peaje laboral y aún lo estoy pagando, pero no me arrepiento de nada.

Algún día podré retomar el tren, y si lo he perdido pa siempre, pues bueno, cogeré otro distinto, que a ninguna se nos caen los anillos.

Estoy segura que tu encontrarás mas de una oportunidad en el ámbito laboral, afortunadamente vives en un país con legislación mucho mas avanzada que no solo te protege a ti como madre sino también como mujer. Y lo que has hecho por la pequeña Victoria ofreciéndole todo tu tiempo, tu vida, sin duda alguna te dejará siempre con la satisfacción del deber "bien" cumplido

Gabriela, muchas gracias por tus palabras, por eso añadí a mi comentario, que a pesar de todo "no me arrepiento de nada"

Besitos lácteos

Hola Gabriela!
Piensa que no te vas a perder una de las tomas que más os gustan, sino que la vas a posponer un par de horas. Los peques tienen una gran capacidad de adaptación, nosotras también, pero ellos mucho más de lo que creemos, verás como luego todo es más fácil de lo que te parecía.
Yo todavia no he llegado a ese punto, porque me he pedido excedencia, mi peque tiene 7 meses, pero llegará un momento que tenga que volver a trabajar, porque hay un mundo ahí fuera aparte de mi peque, y también es satisfactorio estar ahí, y más si tienes la suerte de disfrutar de tu trabajo. Sé que no es lo mismo, pero hace unos días me llamaron para dar una charla, tenía que estar fuera unas 4 horas, así que los abuelos se quedaron de niñeros, y yo padeciendo toda la mañana, acordándome de mi peque... y al llegar a casa, el pitufo tan contento y casi ni reaccionó cuando me vio!! A veces nos hacemos un mundo las mamis, y luego ellos tan felices!
Un abrazo y verás como os adaptáis estupendamente.

nur escribió:Hola Gabriela!
Piensa que no te vas a perder una de las tomas que más os gustan, sino que la vas a posponer un par de horas. Los peques tienen una gran capacidad de adaptación, nosotras también, pero ellos mucho más de lo que creemos, verás como luego todo es más fácil de lo que te parecía.
Yo todavia no he llegado a ese punto, porque me he pedido excedencia, mi peque tiene 7 meses, pero llegará un momento que tenga que volver a trabajar, porque hay un mundo ahí fuera aparte de mi peque, y también es satisfactorio estar ahí, y más si tienes la suerte de disfrutar de tu trabajo. Sé que no es lo mismo, pero hace unos días me llamaron para dar una charla, tenía que estar fuera unas 4 horas, así que los abuelos se quedaron de niñeros, y yo padeciendo toda la mañana, acordándome de mi peque... y al llegar a casa, el pitufo tan contento y casi ni reaccionó cuando me vio!! A veces nos hacemos un mundo las mamis, y luego ellos tan felices!
Un abrazo y verás como os adaptáis estupendamente.

Muchas gracias Nuria por tus palabras y tus ánimos, casualmente mu hija está aceptando muy bien otra papilla de frutas que hasta hace una semana no la quería ni ver Es verdad, yo se que ella se adaptará y que esa toma la pospondremos para mas tarde, mi suegra me ha dicho que la va a hacer dormir un poco por la tarde para que se duerma un poco mas tarde que lo habitual y podamos jugar un ratito mas cuando yo llegue

Muchas gracias nuevamente!