Sobre la depresión postparto

Como ya os había comentado, estuve trabajando para la formación de Doula en la depresión posparto. Aproveché el impulso y organicé una reunión de mamás (con un record de asistencia) sobre el tema, y me resulta muy interesante. Además, creo que como en todos los temas relacionados con el puerperio y la maternidad está lleno de mitos.

Lo primero, reconocer los tipos que hay
- está la tristeza transitoria o "baby-blues" que dura desde unas horas a algunas semanas depués del parto. Suele aparecer en los días cercanos al nacimiento, pero también se han visto casos semanas o inclusos meses después de parir. También se ha visto durante el embarazo. Esta es una respuesta anímica nuestra a los cambios hormonales y corporales que significan el nacimiento (una auténtica revolución). Aclaro que NO ES UNA ENFERMEDAD, y afecta a un 70% de las mujeres (yo creo que más, pero esto dicen las estadísticas) y 30% de los padres.

- Luego la depresión postparto, que si requiere tratamiento, por lo tanto si es una enfermedad. El ideal sería que ese tratamiento sea compatible a la LM.

- y la depresión sicótica donde bebé y madre corren peligro vital, que afecta a apenas un 0,1% de las madres.

Importante es reconocer en que fase estamos o estamos viendo. Hay además predisposiciones que vale la pena tener en cuenta;
- Tenemos casos de depresión en nuestro entorno cercano?
- Aunque estemos tristes, encontramos algún momento de alegría en el dia?
- fundamental es comer como máximo cada tres horas, para evitar los bajones de glucosa
- y descansar cuando el bebé descanse, lo que el cuerpo nos pida.
(Si la madre no encuentra un minuto del dia para comer, o para descansar, es una alerta)

Aqui al menos se está respetando mucho la LM y se reconoce la importancia en la mejoría de la madre sobretodo cuando el parto ha sido muy intervenido, es una posibilidad de recuperar ese vínculo "arrebatado". Incluso las madres con brote sicótico (que necesitan ingreso hospitalario) se les ingresa con el bebé. Fundamental es apoyar a las madres.. nosotras que estamos en contacto con otras madres recientes, estar atentas. La depresión postparto tiene tratamiento y muy buen pronóstico. No nos avergoncemos, no es nuestra culpa. Es fundamental hablar, nombrar, pedir ayuda.

Un fuerte abrazo

Hola! Que interesante y que bueno que se esté dando lugar a este tema y contención a las madres que atraviesan por estas situaciones.

Yo recuerdo que cuando comenzó a bajarme la leche empece a sentirme muy triste. Me duró algunos días, diría que poco más de una semana. Me sentía muy triste e irritable y estaba asustada con lo que le pasaba a mi cuerpo, los pechos doloridos, mastitis, grietas, el bebe que lloraba, sentía miedo de no poder manejar mi nueva situación, de no poder ser una buena madre, etc. etc. Me hacia un mundo por todo.
Fueron pocos días, pero en ese momento me hubiese venido muy bien contar con una persona o grupo de contención.

Los cambios hormonales algunas veces hacen estragos.

Que bueno que se generen estos espacios de información y contención.

Ximena, gracias por la info.

Yo conocía estos tres tipos porque cuando nació HH lo pasé muy mal, me sentía triste, echaba de menos mi vida pre-madre, deseaba que mi hijo ya fuera mayor y me dejara dormir, me sentía perdida, asustadísima... me costó enamorarme de mi bebé, qué triste cada que lo pienso con lo que le quiero ahora que pierdo la vida por él...

Me preocupó que pudiera tener una depresión pero, después de informarme, me autodiagnostiqué   una tristeza postarto que se fue, efectivamente, en unas tres semanas. Casualmente cuando el papá volvió a trabajar y me quedé sola con mi bebé en casa. Me descubrí a mí misma una mañana haciéndole mil fotos y ese hecho tan simple me sirvió para darme cuenta de que "estaba curada"

Y es verdad que no hay que avergonzarnos ni sentir culpa porque es algo que no elegimos... El parto de HH fue tan tan pero tan instrumentalizado que lo raro hubiera sido una relación idílica con mi bebé y la nueva situación. Animo desde aquí a todas las mamis que estén pasando por ello que busquen ayuda, que lo cuenten, que lo nombren. Que piensen que es una situación totalmente pasajera y que en poco tiempo les dolerá el corazón de querer tanto a su bebé..

besos!

Ximena

yo tambien tuve dias dificiles cuando nacio mi enano, nose si llego a ser depresion, para mi era angustia de pensar que el bb estaria conmigo varios años antes de ser mas independiente,frustacion de ver a personas que me rechazaron antes y durante mi embarazo tener a mi bb en sus brazos como si nada hubiese pasado, pena por saber que mi esposo solo estaria una semana con nosotros luego se fue a otra ciudad por trabajo 9 meses y nos visitaba cada fin de semana.

pero cuando iba a mis controles post parto vi a una mujer en estado casi vegetal que no podia hacerse cargo de su bebe, ella habia llegado al punto de usar pañal, la alimentaba su mama,mientras el papa sostenia al bebe que lloraba desesperado, entonces reaccione, que me estaba perdiendo de la vida "normal" trabajo, dinero, vida social y que? tenia un bb hermoso, saludable y lleno de vida,yo me recupere en una semana de mi maravillosa cesarea,hubiese sido antes si hubiese preguntado mas cosas.

cada caso es diferente pero siempre se llega a un punto de sentirse sola, confundida o presionada, desahogarse ayuda mucho, conoci MI cuando mi peque tenia 17meses, si las hubiese encontrado antes hubiese saturado el foro de desahogos,muchas veces solo necesitas eso hablar y que te escuchen, sin juzgarte, sin verte como un monstruo por decir que no te enamoraste del bebe en cuanto lo viste.

ahora mi peque es el centro, motor y motivo de mi vida, ver como se desarrolla, ser parte de su vida las 24 horas del dia, no me arrepiento fue mi mejor eleccion.

besos

Ximena,
Gracias por la información, puede convertirse en una referencia. Yo que tú editaría el título y le pondría uno más informativo para que saliese en las búsquedas de Google. Qué sé yo: "Depresión posparto: tipos, fases y sentimientos de culpabilidad". Ya que sabes más del tema también podrías hacer referencias a información válida sobre el tema (enlaces a webs, libros, etc.). No sé, ampliar un poco el post, que tiene muchas posibilidades. jjj te lié!!

Bueno, sólo es una sugerencia. Me encanta lo que haces.

Besos!

Que bonitas experiencias, muchas gracias.

Yo recuerdo haber ido a las clases de preparación al parto y que comentaran que alguien debía de cuidar a la madre, y yo pensé: baff! yo podré con esto y con mucho más!!! y luego me vi después de mi primer parto (super intervenido) que no era capaz de guardar una camiseta en el armario... me puse a llorar de la impotencia de sentir que todo había cambiado y que yo no hacía nada bien (el pecho no funcionaba, no podía parir, no podía cuidar de mi bebé, ni siquiera ordenar la camiseta). Pero pasa, si que pasa.

Me llamó la atención que en este grupo éramos 8 hablando y TODAS teníamos algo que contar. Y lejos de lo que podamos pensar, la fórmula no es parto respetado = no depresión o tristeza. De hecho, había una que dió a luz en el agua, full respeto y no se enamoró de su bebé hasta los dos meses. Es cierto que el parto juega un papel importante, pero no el único. Podríamos decir lo mismo con la lactancia.

Y la culpa... uff pasan los años y este tema vuelve y vuelve. Parece que viene incluído al pack mamá-bebé! creo que nos deberíamos de dar el gusto de no sentir culpa por NADA que no hayamos hecho nosotras. Lo que el médico hizo se nombra, se denuncia, nos enfadamos con el, pero no nos quedemos en nuestra culpa..

El apoyo es fundamental.. estoy super convencida. Yo presto un oido, un hombro para desahogarse, a veces hacemos visualización o les doy un masaje para que no se olviden que su cuerpo está aqui, y no donde la llevan sus pensamientos y las mamás se relajan.. ainsss Nuria, a mi también me encanta lo que hago!!! no veas que efectos tiene en las madres.

Yo estudié mucho esta web, es MUY completa, y hay un cuestionario en alemán, italiano y francés para saber en qué lugar de la tristeza estamos
http://www.postnatale-depression.ch/joomla16/index.php/de/downloads/fragebogen-edinburgh-skala

Un abrazo muy fuerte

Me gusta mucho tu estilo Ximena. Bueno, en general eso ya lo sabes, con muchas cosas. Pero hay algo de tu nueva etapa (bueno, ¡no es nueva! pero sí que lo estás vertiendo hacia tu profesión y por eso la llamo "nueva") que me gusta mucho. Y es la utilización para bien del relativismo. Al hacer de esto algo más que tu yo mamá y pensar en el parto, en la intervención, etc. (ojo, algo que llevas haciendo mucho tiempo, no digo que sea nuevo) no te has ido al lado radical que a veces acostumbro oír. Por ejemplo, parto intervenido= depresión, parto intervenido= no enamoramiento, biberón= no enamoramiento. Esto puede ser, puede que lo facilite, realmente no tengo ni idea, pero no tiene porque ser estrictamente así. No me cabe duda que hay factores corporales/hormonales/naturales que desdencaden muchas cosas de una manera inevitable pero luego también está el pasado/presente/futuro de cada mamá, sus experiencias, su confianza en sí misma...

Yo no tuve la sensación de tener un parto intervenido, aunque luego descubrí que algo hubo. Me metieron oxitocina por vena, y vaya que si lo sufrí ¡pero no por el enamoramiento, sino por las contracciones tan duras que tuve! aunque ¡ojo! en el segundo no la hubo y ¡menudas contracciones cuando empezaron en serio!! Ambos partos fueron con epidural. El sentimiento de enamoramiento fue radical e instantáneo en los dos casos. La gran diferencia es que en el primero no puedes vislumbrar todavía el gran cambio que acaba de suceder. Ni de lejos. También con el segundo, como hay que repartir la tarea con el primero, no toda la atención está puesta en el bebé y en la madre y te permites vivirlo mucho más libremente y encima sin miedos porque ya sabes lo que es.

Bueno, todo esto es aceptable para mí, no para todo el mundo. Experiencias todas. Esto es lo bueno de la red, que en ella cabemos todas las experiencias y que es posible contarlas y aprender.

Pero, bueno, a lo que te decía al principio, que me alegro que hayas optado por el camino de la empatía 100%, no de la lección de la que sabe mucho, sino la que echa semillas al viento que vuelan y vuelan y algún sitio anidarán: ni más ni menos de quien quiera recogerlas, amar el mensaje y ponerlo en práctica.

Y lo de la culpa... ya sabes que tu post sobre la culpa sigue siendo una referencia para muchas (algunas nuevas no lo conocerán, ya lo buscaré).

Gracias por todo. Gente como tú nos hace falta.

Besos!

Mil gracias Nuria.. tus palabras son una gran caricia para mi.. ya sabes que este tiempo no ha sido fácil con el aprendizaje de otro idioma, de no encontrar trabajo, de ver que mi vocación está donde no hay dinero.. uff pero eso da para otro post!

Quiero agregar a lo dicho (y esto es una reflexión personal y muy actual de lo que vivo) algo con respecto a nuestras expectativas y frustraciones. Ahí creo que se puede jugar mucho con respecto a la desilusión. Los medios de comunicación, incluso nosotras mismas cuando intercambiamos ideas de maternidad (no aqui, pero en general) solemos contarlo como lo más maravilloso, y no como los momentos difíciles. Y no es malo que no se cuenten, de hecho, solemos olvidarlos muy pronto, o sabemos que al final la balanza siempre estará inclinada hacia lo bueno.

Pero es que nos llenamos de anuncios, de imagenes de mujeres que quedan super-guapas después del parto.. y la mayoría quedamos super guapas, con nuestro cuerpo de mamá, no con nuestro cuerpo de quiceañeras (que por cierto, no lo tenemos, porque no tenemos quince años!!). Y nos jugamos a nuestra autoestima metas difíciles de alcanzar, que si bajas tantos kilos en tan poco tiempo, que si recuperar nuestra vida sexual, si quedar con las amigas y llegar a la hora cuando nuestro cuerpo nos pide otro ritmo!!!

Os invito a las que estéis en el puerperio a querer este nuevo tiempo, a amar nuestro cuerpo milagroso, a tomarnos del entorno solo lo que nos hace bien.
Un beso muy fuerte a todas.

PD el post sobre las culpas
http://www.maternidadinstintiva.com/t7448-criar-con-amor-pero-sin-culpas

Totalmente de acuerdo en cuanto a que no siempre un parto instrumentalizado desencadenará después una tristeza/depresión postarto. De hecho, mi segundo parto fue natural, precioso... y tampoco me enamoré de Oliver a primera vista. En ambos casos existieron otros factores, personales, íntimos... que seguro tuvieron algo que ver. O simplemente no soy mamá-flechazo jajaaja

Gracias por todo. Gente como tú nos hace falta

      

y añado: qué alegría seguir leyéndote por aquí!

besos!

Os invito a las que estéis en el puerperio a querer este nuevo tiempo, a amar nuestro cuerpo milagroso, a tomarnos del entorno solo lo que nos hace bien

Y yo haría esa extensión a todas las fases de la vida. El puerperio es algo muy especial en muchos sentidos. Genial si es para bien, pero también muy delicado si es para mal. Cuando miro atrás pienso que si sobreviví al terremoto de nuestra vida cuando lo de Simone fue precisamente por la revolución hormonal del puerperio. Ese amor tan absolutamente desbocado que hace ver la realidad desde otra óptica. Además de las diferentes personalidades, estoy convencida de que papá lo tuvo mucho más difícil por no tener ese plus de estado especial.

Amarnos, en cualquier etapa, es fundamental. En el puerperio puede que más porque marca mucho, pero por contra es un periodo muy breve. Es tan importante querernos en la vida.

O simplemente no soy mamá-flechazo jajaaja

Me ha encantado esa frase tuya Laura (¡cambio de avatar!!) por lo que tiene de sentido del humor y de reírse de una misma, pero también por lo que tiene de explicación a tu vivencia. Se espera una cosa (el flechazo maravilloso que hay que tener) y que tú encuentras en otros tiempos, a otro ritmo. Ese otro ritmo lo explicas a través de "no soy mamá-flechazo". Es fantástico. Es mucho mejor que no un lamento "me siento culpable por mi otro ritmo". Y fíjate dónde estás con ese otro ritmo: dónde todo el mundo o mucho mejor, una madre volcada e implicada en grado sumo. Todas las vivencias no son corta y pega y no hay que compararse, hay que aceptarse.

Besos!

Me esta encantado esta entrada, muchisimas gracias por la informacion que yo desconocia completamente....en mi caso, pese a tener un parto para mi respetado, y aunque me pusieron oxitocina, epidural....etc, en ningun momento me sentí violentada, me senti respetada y arropada. Mi enamoramiento fue justo, cuando por fin nos dejaron solos, despues de revisarla, de coserme, de todo....... papa, mama y la bebe, encima de mi, comiendo tetita fue justo ahi ,en ese momento que supe que era el amor de vida y tambien descubri lo mucho que amo a mi marido  .

Fisicamente mi recuperacion despues del parto fué espectacular, y emocionalmente tengo que dar las gracias a marido, en aquel momento estaba en paro y realmente no mal que por bien no venga, me vino de lujo, nos despartabamos tarde, me acompañaba en las tomas nocturnas, me preparaba y me daba!!!! la comida mientras yo tetaba con la cria, como el decia, yo cuido de ti y tu de nuestra hija, y esta cadena nos funciono de maravilla, encuentro que las mujeres nos ponemos un listonazo extramadamente alto ( o nos ponen) tienes que ser una buena profesional, una estupenda pareja, mejor amiga y como madre perfecta, y luego cuando ese castillo se desmorona delante de ti, tienes dos opciones o aprendes y modificas el eje de tu vida o puedes llegar a caer en el mayor y cruel de `los pozos.

Gracias por la entrada

Hola chicas, que interesante leer sus experiencias que acompañada me hacen sentir.

Yo no se cuanto dura el puerperio, pero algunas veces siento que aún al día de hoy estoy en esa etapa.
Mi pequeño ya tiene 16 meses, camina, corre, trepa, yo hace un año me reincorporé a mi vida laboral (que me pesa aún), pero a pesar de todo siento que aún estoy en esta etapa.

Yo tampoco me sentí violentada durante el parto. Fué un parto un poco complicado pero para mi fué maravilloso. Muchos médicos lo habrían resuelto con una cesarea pero mi obstetra insistió en un parto normal y que bueno que se manejo de esa manera. Yo venía de reposo por tener poco líquido, dilate de forma excelente y rápido, pero descubrieron en ese momento que mi peque tenía dos vueltas de cordón así que me tuvieron más de una hora reteniendo las ganas de pujar para poder desenroscar el cordón.
Yo no quería epidural pero no soporte ese tiempo sin poder pujar y la pedí. Fue para mi un trabajo maravilloso entre el obstetra, mi bebe y yo. Mi marido que me acompaño en todo momento cuidándome y tranquilizándome cuando sentíamos que bajaba el ritmo cardíaco de nuestro bebe.
No recuerdo en que momento me enamore de mi pequeño, estaba muy angustiada cuando lo colocaron en mi pecho. Porque horas antes pensé que lo perdía. Y solo recuerdo que le pedía a gritos al obstetra que me confirme si estaba bien.
Uf, fue todo muy intenso, luego de llegar a casa me sentía aturdida.
Yo sentía la necesidad de estar en la habitación con mi pequeñín y descansar juntos. Recuerdo que mi mamá me dijo despues de dos semanas que ya era hora de que hiciera vida normal, que saliera de la casa, que dejara la habitación, que me vea con mis amistades y demás EXIGENCIAS. Tal vez ella tenía miedo porque habían sido muchos meses de cama antes del parto, tal vez temía que yo no quisiera retomar mi vida, no lo se. Pero yo necesitaba estar refugiada en mi habitación amamantando y cuidando a mi pequeño, en ese momento no tenía energías más que para eso.
Toda esa situación de confusión y angustia no se la tribuyo al tipo de parto, sino más bien a las hormonas y a la responsabilidad que implica saber que lo mas valioso en nuestras vidas depende de nosotros.

Al día de hoy muchos en mi familia y amigos me critican porque no hago más que trabajar y estar con mi bebe. No tengo energías para más, ni tiempo. He dejado de asistir a las cenas con mis amigas a pesar de que me dicen que lleve a mi pequeño, porque prefiero bañarlo, alimentarlo, acunarlo, amamantarlo y acostarme con él, lo cual las tiene un poco molestas conmigo. No hago actividades en la semana porque llego a casa ya tarde y no puedo dejar a mi pequeño más tiempo solo, me desespero de solo pensar que podría alejarme más tiempo de él. Me dicen que porque no voy a gimnasia, que porque no me hago un tiempo para mi, pero no puedo hacerlo ahora.
Es más, no estoy menstruando tampoco. Menstrué cuando volví a trabajar y luego deje de hacerlo, se que es por amamantar y estoy tranquila.
Yo aún me siento de puerperio, me da un poco de vergüenza decirlo pero seguramente ustedes si me entiendan.
Y siento que todos quieren apurarme, así como siento que quieren apurar a mi hijo para que vayan al jardín, para que aprenda, para que obedezca, para que no sea "mamengo" como le dicen porque quiere tenerme cerca.
Yo tengo mis tiempos y me he plantado, ser madre me ha enemistado con muchas personas que no están de acuerdo conmigo y por primera vez en mi vida digo NO ME IMPORTA. No puedo ser de otra manera en este momento.

Creo que como dice Quima se nos exige demasiado.

Mi cuerpo y mi vida aún se siguen adaptando, aún estoy de pos parto.

Poco se del tema, pero haré mi humilde aportación, desde la perspectiva de una mera espectadora que se pregunta cómo le irá cuando nazca mi bebé.

Leo y me quedo con cada una de vuestras experiencias; trato de empatizar e identificarme desde la más absoluta ignorancia, por que aún no soy madre. Y tengo que reconocer, haber juzgado, desde la barrera, a otras madres cuya conducta para con sus bebes y con ellas mismas no era lo que social y mediaticamente se impone.

Nadie más que la propia madre conoce las necesidades del bebé y las propias; sin embargo, desde fuera, se trata de juzgar, de opinar, de imponer y criticar, cuestionando a la mamá en su manera de criar. Y bastante tiene ya la madre en aprender a serlo, en sentir serlo y en adaptarse a ese pequeño desconocido que es su hijo, que tanto depende y exige de ella para su propia supervivencia. También los cambios del propio cuerpo, las sensaciones nuevas, la incertidumbre de saber si actúa certeramente...
Y las espectativas generadas a cerca de la maternidad..

Creo que el puerperio es una vorágine de circunstancias, físicas, psicológicas, afectivas, acompañadas de las del propio entorno... estar ca la altura de todo esto es una cuestión personal. Creo que cada mujer decide que es lo que le conviene, y oír ello no ha de sentir culpa ni vergüenza...