Obediencia o civismo

Alba,

yo trato de educar a mis hijos en el respeto al otro y, por extensión, en el respeto a lo que es de todos y a las normas de convivencia, aunque es cierto que mi hijo mayor -5 años- conoce ya los conceptos multas y cárcel desde más temprano de lo que me hubiera gustado (porque la idea de varios miembros de la familia sobre la educación es ésta) así que no es poco habitual que me pregunte si te ponen multa o vas a la cárcel, haciendo tal o cual cosa. Yo contesto siempre sinceramente pero trato de poner el enfásis en que se trata de normas de convivencia -cuando es así- y en educar la empatía; obviamente cuando en la calle o los demás familiares dicen que "hay que hacer tal o cual" si se trata de algo que es una simple convención social, se lo explico también. Educar en el pensamiento crítico también ha sido siempre mi idea, aunque he de decir que, para la edad que tiene, mi bajito mayor -el peque sólo tiene dos años, aunque ya apunta maneras   - ya es lo suficientemente crítico con la autoridad por sí mismo sin que yo haya hecho nada al respecto -al menos, no conscientemente   -, y expresa muchas veces que hace tal o cual en el cole por evitar que lo castiguen, no porque esté convencido de que eso sea "lo justo" o "lo que debería hacer/hacerse".

En cuanto a Alemania, sinceramente mi conocimiento de la sociedad alemana se limita a unas pocas personas oriundas de tal lugar (la mitad "muy alemana" y la otra mitad, alemanes bastante "atípicos") y a algunos autóctonos que han estado o vivido allí una corta temporada si bien, curiosamente, todos coinciden en que allá el respeto a las normas se debe más o prioritariamente al miedo a las consecuencias que a otras razones.

¿Te puedo preguntar si hay alguna razón en particular por la que te interse este tema en especial? ¿Estudias filología alemana o has vivido allí?

Un abrazo.

No doy ya mucho de sí que estoy hecha una pena y debería estar en la cama, pero no puedo dejar de decirte, Almudena, que en el caso concreto que planteas, el error lo cometes tú, no tu pequeña gran I. (lo digo desde el cariño, como dicen en la tele  , no te ofendas)  y ella te demostró que, efectivamente sí que se podía; si le hubieras dicho que no debería estar en la cocina porque el aceite caliente puede saltar y quemarla, estoy segura de que hubiera atendido sin problemas tu llamada de atención.   Almu, me has recordado a mi casa      : la de veces que "jugamos" con el "se puede, pero no se debe" y similares (pensamiento divergente, creo que lo llaman). ¡Cuánto me recuerda tu peque a mi bajito!  

Un abrazo gordote.