Siete años...

El 1 de abril Bruno cumplí siete años, y de algún modo yo también. Fueron siete años de cambios enormes, de aprendizajes, de nuevas experiencias. Siete años también, coincidentemente, en mi actual trabajo. Parece ayer que tenía en mis brazos ese pequeño bollito que necesitaba mucho más de lo que yo era capaz de dar, y que afortunadamente pude, no sin esfuerzo, aprender. Alucina lo que la disposición emocional puede hacer, puesto que cuando nació Bruno tenía todo a mi favor para dedicarme a él y nada más, y me costaba muchísimo, y Laura haya sido tantos meses una extensión de mí, que lloraba sólo para hacer caca, dormía plácidamente en mi cuerpo y pasaba sonriendo las horas despierta. Y le debe, sin duda, esa madre dispuesta a su hermano mayor, que fue mi maestro, el que me enseñó qué necesita un niño para crecer sano, sólido, seguro.

Día a día nos sorprende con sus preguntas, y más aún con sus respuestas. Es cariñoso con todos nosotros, nos admira profundamente y tiene siempre palabras de aliento para elogiar nuestro trabajo -"Qué bien te sale mamá", "te está quedando re-bien papá"-. Algo perfeccionista, siempre observa el detalle mejorable con mucha agudeza. Su vida social se ha complejizado, sus emociones han madurado, duerme lejos de casa cada vez más seguido, lee, escribe, hace operaciones matemáticas muy complejas para su edad. Y cada tanto en medio de todo eso, se acerca a dar el mejor abrazo que pueda existir, y tiene siempre uno más grande y cariñoso para su hermana, que ha copado las mayores demostraciones de cariño. Sensible, inteligente, trabajador. Ha colaborado con sus propias manos en la construcción de su habitación, en la cocina de todos los dulces del cumpleaños, ha revisado con detalle la información que aparecía en el souvenir que inventé para él -un pequeño librito sobre el sistema solar-, y es increíble como se inspira a poner manos a la obra cuando nos ve hacer algo a nosotros. Si me pongo a recortar y pegar las cajitas de regalo, él lo hace también, si cocino, lo mismo, si papá está trabajando en la casa, él lo mismo. Y es nos recuerda cuánto educa el ejemplo, cuán importante es que nosotros seamos lo que queremos que él sea.

El bendito tiempo del que habla Vero me ha dejado con pocas fotos del evento. Tengo algunas que sacaron mis padres y no pude grabarme todavía. Es mucho menos de lo que quisiera decir, quizás edite en algún momento. Pero quería compartir con ustedes esta felicidad inmensa, este maravilloso hijo que crece y crece, con el que aprendemos tanto -nos da clases con el pizarrón- y que tanto nos ayuda y sostiene en el día a día. Más de una vez, yo corro para preparar bolsos y mochilas de jardín, escuela, trabajo, y él come mientras le da de comer también a su hermana. Hace poco dijo: "Si Laura está dormida o si yo estoy en la escuela, siento que me falta algo. DEsde que nació Laura me pasa eso". La hermana devuelve con infinita admiración y sonrisas. Si se despierta la chiquita mientras me estoy bañando él trae su cochecito al comedor y la entretiene hasta que termino. Sería infinita, interminable la lista de los pequeños momentos felices que nos regala todos los días. Por eso, cualquier regalo, cualquier festejo, queda chico al lado de la inmensa, inconmensurable felicidad que nos da este amoroso hijo. Somos muy afortunados, los más ricos del mundo, te amamos Bruno, gracias infinitas por haber llegado a enriquecer, a complejizar estas vidas que ya son inimaginables sin tu presencia.

Y gracias a ustedes, las que me han acompañado a transitar esta maravillosa aventura a la que le quedan muchos capítulos más, un abrazo grande, Romina

Emocionante descripción.
¡¡¡Felicidades para ese angel!!!

Que bonito!!
Felicidadesss

Hola Romina,
Qué bonita entrada, qué bonita tú, qué bonito Bruno. Cómo no emocionar tus palabras llenas de admiración. Aun recuerdo tu foto de avatar cuando entré en el foro: una foto tuya dándole de comer al pequeño de Bruno. Ya ha llovido desde entonces. Aunque no tanto... el tiempo es extraño, pasa rápido y lento a la vez... tantas cosas han pasado y siguen pasando.

Qué suerte de hijo tienes. Sin duda, tiene una maravillosa maestra, no me cabe duda. Pero también él que se queda con lo importante y que se preocupa tanto por todos. Mi hijo también ha crecido, y me sigue dando alegrías, pero no me parece tan perfecto como Bruno le veo más defectos jj aunque, claro, me quedo con lo positivo, sin olvidarme de insistir en algunas cosas que no me parecen tan perfectas

Qué suerte que no se peguen Romina. Supongo que la diferencia de edad hace lo suyo. Porque por aquí, si bien la relación entre hermanos tiene lecturas positivas, a veces es más un martirio que otra cosa. Nada que ver con la relación de amor idílica que se profesan los tuyos... buff, ni hablar.

Así que, nada, leo tu entrada con admiración por haber cosechado lo que sembraste. También con envidia de ver tus resultados tan sobresalientes. Y te felicito enormemente por haber sabido compatibilizar ese tipo de dedicación encontrando un hueco siempre a tu esforzada y limitada vida laboral.

7 años de Bruno, pero un 10 para tí y otro para él. No solo os parecéis físicamente (sois clones) sino que Bruno ha salido sin duda a ti. Así que felicidades a los dos porque sois un ejemplo.

Besos!

Gracias chicas, y gracias Nuri querida, sabes que eres un capítulo especial de esta aventura, desde esos primeros meses en que aun le acercaba a Bruno la cuchara a la boca, hasta ahora que me ayuda a cocinar.

La verdad me releo y bueno, claro que Bruno tiene defectos, pero como buena enamorada, están ahí, pequeñitos, simplemente presentes para intentar dar lo mejor de mí y ayudarlo a lidiar con ellos. Más que defectos le veo limitaciones que necesita superar, y en estos años ha hecho un muy buen camino en ello. Sigue siendo un niño tímido y algo estructurado, pero ha aprendido a acomodarse bastante a las circunstancias y a la vida cotidiana de la escuela y la vida social propia de su edad, así que estimo lo hará cada vez mejor -cosa que me interesa básicamente por su bienestar-.

En cuanto al amor de hermanos, sin duda la diferencia de edad ha oficiado gran parte del milagro. Las necesidades de ellos son muy diferentes y eso ha hecho mucho más factible la posibilidad de satisfacer ambas sin sacrificar la atención de ninguno, la mayor parte de las veces. Bruno tuvo una prolongada exclusividad que me permitió, por ejemplo, llevarlo a hacer las compras porteado hasta los tres años y pico, lugar que le hubiera tenido que ceder al hermanito si hubiera llegado en ese momento. Estoy segura que eso ayudó mucho. En parte le debe esa larga exclusividad a mi tesis, pues tenía claro que hasta que no la terminara no era el momento de sumar un bebé a la familia.

Hoy necesita más diálogo que cuerpo, es autónomo en muchos rituales cotidianos, y puede compartir con papá muchas actividades que descomprimen más aún la posibilidad de "competencia por atención" lógica entre hermanos. Por su parte, también está la suerte de que Laura, siendo pegota y cariñosa, es también más flexible que Bruno a su edad, y si bien se despierta muchas veces y tiene el sueño propio de un bebé, puede llegar a dormirse en brazos de papá o incluso de los abuelos. Así que son varios los factores que colaboran en que su vinculo sea tan llevadero.

Laura tiene la fortuna de tener además, en mi sobrino un primo amoroso, tan cariñoso y cuidadoso como su hermano con ella. Creo que compartí con ustedes una foto de ella muy bebita, con los dos, uno besándola en cada mejilla.

Con la vida laboral he tenido suerte, no sin esfuerzo, tuve la fortuna de encontrar en el momento justo una actividad con la flexibilidad necesaria para poder acelerar y desacelerar cuando hizo falta. Vamos a ver cómo sigue.

Pero Bruno, mi Bruno, que es el protagonista de este post, es maravilloso, todas las palabras me quedan pequeñas para él.

PD: Cuando este todo listo, también compartiré alguna foto del gran trabajo de esta temporada, la nueva habitación, para la que he preparado una decoración muy especial y personalizada para él.

GRacias, una vez más, compañeras de ruta, cariños, Romina

¡Desde ya espero esa foto! Seguro que me anima a proponer algo parecido en mi casa, que además, está haciéndose todavía... (en el sentido de que faltan tantas y tantas cosas, pero no lo importante, sus cuatro miembros).

Me encantan los chicos tímidos, la gente callada! Así que adelante. Es verdad que los defectos que encuentro en Ulises (también relacionados con su sociabilidad, aunque no precisamente por timidez) estoy segura que los irá superando. Ahí estaré yo para intentar darle un poco de luz en ese sentido, tratando de lidiar en ese punto intermedio entre no machacar la personalidad del crío y proponer cosas que no salen de ellos tan fácilmente. Al fin también están en juego nuestros propios prejuicios y maneras de encarar la vida. Todo un reto sin duda...

La diferencia de edad, desde luego, ayuda muchísimo. Y también el carácter del pequeño. Simone tiene don de gentes y es encantadora, pero en casa le tiene algo de celos a su hermano y enseguida la bronca está montada. Ene, qué paciencia.

Por lo demás, Bruno, lo importante aquí... me encantaría hablar con él. Me lo imagino tan suave, tan paciente, tan atento... 7 años me parece ya una barrera muy importante. Entra ya en una edad donde ya tenemos claramente recuerdos de muchas cosas, así que somos bastante responsables en la generación de esos buenos recuerdos. Ay, Bruno, chico listo. Seguro que aquel carretillo lleno de ladrillos de cuando eras pequeño te sirve para construir una vida de base sólida, llena de preguntas y respuestas que tú irás construyendo. Tienes suerte, Bruno, no todo el mundo tiene una mamá como Romina. Pero, bueno, seguro que tu mamá se sabe apartar a tiempo, y dejarte volar e inventar tu vida. La base la tienes fuerte, chico.

Un beso!!

Querida Nuri, me hacen lagrimear esos momentos que hemos compartido tan intensamente a la distancia.

Ya veremos cómo resulta el proyecto habitación, que es bastante pretensioso.

GRacias por tus palabras, que atesoro para Bruno. Un abrazo gigante, y queda pendiente la promesa de las fotos, un abrazo, Romina

Romina, a mí también me emocionan tus palabras hacia Bruno. Qué bonito... felicidades a ti también por estos siete años y si!! qué tiempos aquellos de aquella foto de avatar... pero ahora igual hay otras fotos y otros momentos igual de felices y entrañables. Un beso enorme para ambos!!

Felicidades a ambos por llegar a esa edad mágica, cabalística. Me encanta la dulzura de tu pequeño para con su hermanita. Sigue así, pequeño Bruno. Los niños como tú hacen más hermoso el universo masculino.
Enhorabuena por vivir de forma tan plena vuestro vínculo materno-filial.

Como dijo Nuri, qué bonito Bruno, qué bonita tú. Muchas felicidades querida amiga, a ambos, porque se merecen el uno al otro. Y estoy segura de que Bruno es asi porque no has hecho más que sembrar un campo de valores y buenos sentimientos para que él creciera y se desarrollara felizmente.

Te admiro Romi y que siempre seas capaz de seguir siendo feliz para transmitir felicidad a tus hijos.

Muchos besos

Entro muy a lo lejos.. pero no quería dejar de saludar a Bruno y a su estupenda mamá... ¡¡es tan bonito todo lo que cuentas!!

Un hijo así solo se puede deber a una mamá tan linda como la que le tocó.
Un fuerte abrazo a los dos

PD Nuria, de las peleas entre hermanos, nos tocará abrir un post ;-)))

Ayy gracias miles chicas, no tengo tiempo de responder como se merecen. Me debo la reflexión a la que nos invitó Verito.

Me emociona profundamente que llevemos tantos años compartiendo esta maravillosa aventura. ¡Besos!

Bufff, vergonzoso, llego tardísimo!!!!, cabeza gacha y sonrojada.

Felicidades príncipe Bruno

No más tarde de lo que llego yo a responderte Cris, todavía no me bajé las fotos al pen drive, me pasan los días, las semanas, los meses, volando...

Besos y gracias!

No más tarde de lo que llego yo a responderte Cris, todavía no me bajé las fotos al pen drive, me pasan los días, las semanas, los meses, volando...

Besos y gracias!

Por ser la última hay premio?, jeje

Felicidades!, qué bonito leer la evolución de los años, la evolución de esos príncipes!


Besos!

Te premiaría con una foto de Bruno pero todavía no las grabé en mi pendrive.

REcién ayer, a un mes, empezamos a armar el último de los regalos que quedaba sin tocar. Un cocodrilo en pequeñisisisimas piezas para armar. Ya quedó, ahora resta pintarlo.

Tengo en el cel una foto de él leyendo muy tierna, cuando pueda la subo, besos!