Nacimiento de Jesús

Ahora que saco un rato quiero contaros mi segundo parto.

Antes de nada tengo que explicaros que en el tercer trimestre me diagnosticaron feto PEG (pequeño para edad gestacional). Me hicieron varias ecografías confirmándolo. 
Me pidieron que hiciera reposo cosa imposible si tienes otro bebe de 2 años. La preocupación me provocó una urticaria nerviosa en brazos y piernas que daba pena verme. No me aguantaba en mi propio cuerpo.

En la semana 40 me dicen que no llega a los 3 kilos.  En la 40+6 que está en los tres kilos pero que placenta, líquido y cordón bien. Vuelvo a 41+1 y me mira otro profesional. Estima un peso de ¡ 3.670 gr!
Dice: "pero si este niño está estupendo" 
Yo pensaba que todos se equivocaban. Tenía una panza enorme con muchas estrías. Tenía que ser algo más grande que su hermano (3.160) pero no tanto.

Me hacen la última ecografía. Estoy de 41+3. Vuelven a ser los de siempre y dicen que el otro se tuvo que equivocar. Hacen sus cálculos y dicen que es PEG con 3.060 gr.
Yo flipaba. A los dos días tengo que volver para inducción. 
Ya me temía yo que mi parto natural ya se iba al carajo. Yo no quería y se lo hago saber, pero me meten miedo y cedo. 

Esa tarde desesperada hago todas esas cosas que aconsejan para ponerse de parto menos tener sexo porque mi marido estaba malito y por tanto no tenía humor para ello.
En la noche tuve varias contracciones molestas y a las 8:00 de la mañana del 12 de octubre me fui al hospital con mi marido algo tranquila porque sabía que mi cuerpo ya se había puesto en marcha. 

Fui a monitores. Ya estoy con contracciones pero no son regulares. Me ponen una tira de prostaglandinas. Doy orden de que no vaya nadie al hospital excepto mi marido. No quiero distracciones.
Escucho música y al doctor Escudero (grabaciones para relajarse y minimizar dolor del parto). Debe funcionar porque paso el día y las contracciones sólo me resultan molestas. Llega la cena. No dejo ni las migas. 

Me llaman de monitores y conozco a la matrona que más tarde me atenderá. Tiene muchas ganas de charlar pero yo muy pocas. Como han pasado muchas horas pienso que quizá quieran intervenir ya con la oxitocina. Pero me mandan otra vez a la habitación a ver cómo evoluciono durante la noche.  Estoy con 2 cm de dilatación. Mando a mi marido a casa para que esté con mi otro hijo. Si me pongo de parto le llamo. Hacia las doce de la noche empiezo a tener contracciones dolorosas. Voy a monitores. Estoy de 3 o 4 cm con bolsa abombada. Estoy de parto.

Me pongo en la camilla en posición de indio y me encuentro fenomenal así. Me pregunta la ginecóloga si quiero epidural y digo que no. Esta gine me atendió en el primer parto pero cuando dije que no a la epidural le cedió el testigo a la matrona. Me dicen que si quiero parir ahí puedo hacerlo y no pasar al potro. Llamo a mi marido y como está malito me dice que necesita darse una duchita para espabilarse. La matrona me dice que como tarde se lo pierde. Yo no me creo que vaya tan rápido la cosa pero pasé a estar de 8 cm en pocas contracciones. La matrona lo supo sin necesidad de hacer un tacto. Tan sólo observando el monitor. Me pide permiso para romper la bolsa para hacer más rítmicas las contracciones que andaban un poco locas. Me dejan sóla y lo agradezco. 

Hasta entonces no me quejé en ninguna contracción. De repente llega una contracción con una fuerza inesperada, mi cuerpo no empujaba más bien era como sensación de presión. De mi boca salía un grito muy animal totalmente imposible de controlar. Oigo que la matrona corre por el pasillo diciéndome que no empuje, pero para mi sorpresa pasa de largo . Acababa de llegar Samuel, mi marido y fue a abrirle la puerta. 
Rápido  traen la bandeja de instrumental y llega otra contracción, yo grito y mi marido me pregunta si me voy a poner la epidural . "¡Pero si ya estoy pariendo!" El pobre luego me confesó que pensaba que me moría.
Me tumbé un poco, dos contracciones más y la cabeza estaba fuera. No sentí anillo de fuego asi que no supe que la cabeza estaba fuera hasta que me lo dijo la matrona. Los hombros se atascaron un poquito y tuvimos que hacer un esfuerzo extra. Pero sin problemas. 
Me pusieron a mi niño en brazos y no me pareció para nada pequeño.
Nació el 13 de octubre pasada la una de la mañana.
Realmente con contracciones dolorosas estuve poco tiempo.

Mientras salía la placenta con ayuda de un par de pujos el pediatra veía al niño. Me pusieron un punto por un pequeño desgarro y la matrona me comentó que el bebé no era pequeño porque se había atascado de hombros. Me lo traen y se agarra al pecho inmediatamente. Test de apgar 10. Peso: 3.670gr.

Yo ya no me vuelvo a fiar de las ecografías.

El postparto envidiable y la urticaria desapareció al día siguiente. 

Mi peque ya tiene 5 meses y seguimos con la teta.