[Resuelto]Al pediatra-ingresados-en casa

Pobre Manuel, sales de uno y se pone malito el otro

Espero que no sea nada y se mejore pronto... Por la salud de ellos, la tuya y por el examen que está ahí al lado :S

Ya verás como sale todo bien y te da tiempo a todo.

Besos.

¿cómo váis?
A mi me suele pasar, si una se pone mala al menos otra cae después.
Esperemos que lo pase pronto y sin problemas.

Nena! Veo que diversión no te ha faltado! Llegó tarde pero llegó. Piensa que Manuel es más grande y puedes manejar su fiebre de otra manera y seguramente sea un resfriado sin importancia. Y bueno de sólo pensar en Juan y su ingreso se me parte el corazón pobre ahí acosado en el hospital.
Cuéntanos como van?

Joer, si es que no hay 2 sin tres. A nosotros no nos falla, cuando tenemos semanas con m´´edicos es cuando cae mala A. Besos.

Manuel mejor y mi ánimo también. Ahora a darme una buena paliza en semana santa y recuperar el espíritu guerrero, que me está flaqueando un poco, y no me lo puedo permitir.

Besos, gracias a todas.

Siento mucho que tras salir el sol estallara de nuevo la tormenta... Respira hondo...muy hondo...intenta aunque sea difícil pensar en positivo y, sobre todo, pide ayuda. No recuerdo ahora cómo era tu situación familiar, pero si en algún momento tienes en quien delegar cosas de casa o algunas horas para que te lleven a los nenes a pasear...aprovecha.

Tienes muchas cosas que atender y te faltan horas y energía. Ojalá pronto acabes con el asunto de la oposición...

Un fuerte abrazo y no tomes nada más fuerte que la coca cola zero, ehhhh?     

Nunca has perdido tu espíritu guerrero, simplemente, estabas librando otra batalla.

Vanos, campeona, tú puedes!

Besos.

Hola:

No os he contado muchas cosas del hospital, lo bien que nos han tratado: tenemos que volver en junio para una ecografía de los riñones y pensaba dejar un escrito en atención al paciente para dar las gracias.

Se me viene a la cabeza:

-cómo la gente nos veía colechar sin piarla, a pesar de que les dificultaba ponerle a Juan el antibiótico de la noche.

-cómo, si el niño sesteaba o mamaba se buscaban las mañas para tomarle la tensión o la temperatura sin moverle de encima de mí, sin molestarle, con una suavidad infinita.

-un cambio de vía terrorífico, que me pilló desprevenida (en urgencias se la cogieron a la primera, y yo, ilusa de mí, pensaba que no era nada), tras el que nos temblaban las piernas a todos, tras 50 minutos y muchos intentos, con el niño desesperado de dolor y terror. Cómo vinieron al cabo de un rato para preguntar qué tal estaba el peque, si se le había pasado el disgusto.

-el ánimo de los enfermeros, de las auxiliares, las palabras bonitas para los peques, la auxiliar de la tarde que se trajo a una amiga auxiliar de ginecología para presentarle a mi nene y al compañerito de cuarto, que también estaba con infección de orina. Siempre al salir: "si necesitas cualquier cosa, llama".

-la primera sonrisa indudable de mi niño, sus primeros ajos claramente voluntarios.

-la despedia: no te queremos ver más que de visita, Juan.

En fin, que no os lo había contado, y creo que merece contarse.

Besos.

Anda pues de verdad que los han tratado bonito. Es un hospital general o uno de niños? Cómo me alegra que así haya sido, no sabes la congoja que me entra de imaginar peques hospitalizados. O de imaginar hospitales en general (tengo trauma). Es bueno leer que haya hospitales tan respetuosos y sensibles para con los derechos de los bebés y para nosotras como mamás, que al final si ellos sufren nosotras sufrimos.

Hola Isabel:

Haces muy bien en dejar constancia de tu agradecimiento por su buen hacer; yo soy auxiliar de enfermería, estoy enamorada de mi profesión, pero a menudo hay pacientes y familiares que nos hacen sentir a la altura del betún cuando las circunstancias no acompañan o no cumplimos sus espectativas... yo prefiero pensar que el entorno hospitalario pone en tensión a cualquiera...

Me alegro de que vuestra estancia en el hospital haya tenido su lado menos feo...

Un saludo.

Yo creo que lo mismo que nos quejamos también es de ley reconocer cuándo se hacen bien las cosas. Isa, me alegro que dentro de todo la experiencia haya sido favorable

Que bonito do que comentas Isabel, a nadie le gusta ver a un niño ingresado, y los profesionales que los tienen que ver cada día sufriendo con sus famílias seguro que se acaban implicando emocionalmente.
Es una muy buena iniciativa la de escribir una carta de agradecimiento, seguro que les llega al corazón.
Pero se me siguen poniendo los pelos de punta cuando cuentas el sufrimiento interminable de ponerle una vida, pobre angelito! y pobres vosotros de verlo sufrir y sostenerlo! no me lo quiero ni imaginar, 50 minutos!!
Me alegro mucho mucho que finalmente solo sufrierais ese episodio terrorífico y la cosa se solucionara tan bien, eso eso, que no tenga que volver allí si no es de visita amistosa.   

Me alegro mucho de que recibiérais ese trato. Los malos tragos se llevan siempre mejor si hay empatía por la otra parte.

Isabel, imagino lo angustiante de esos momentos en el hospital.
Que bueno que de entre todos los nervios y angustia puedas rescatar el buen trato del personal. Los pacientes siempre deberían ser tratados de esa forma (teniendo en cuenta sus sentimientos) y ni hablar al ser tan pequeñitos que se asustan.
Me alegro mucho de que se hayan topado con profesionales sensibles y considerados.
Que lindo gesto escribir una carta de agradecimiento. Me parece muy buena idea, para que sepan que están haciendo las cosas de forma acertada y sigan en ese camino.
Me alegro de que los peques ya estén bien!
Besos